Las organizaciones agrarias siguen clamando por que se establezcan precios justos para el sector, uno de los esenciales en esta pandemia del coronavirus, que ha supuesto pérdidas importantes en especia para la ganadería. Así lo trasladaron a este diario desde UPA y Asaja, desde donde abogaron por que la próxima campaña de recogida de aceituna se desarrolle como se ha venido haciendo en el caso de la vendimia.

En concreto, la secretaria general de UPA Toledo, Elisa Fernández, se refirió al próximo inicio de esta campaña de la recogida de la aceituna para señalar que muchas de las cooperativas de la comarca talaverana abrirán en diciembre y por ello es importante que la Consejería de Agricultura desarrolle una campaña similar a la que se ha llevado a cabo en la vendimia.

Sobre este punto, Fernández explicó que desde la organización están satisfechos en lo que respecta al Covid-19 porque la Consejería de Agricultura aprobó una normativa que recoge una serie de medidas a cumplir para intentar evitar los brotes que, «de momento, está yendo muy bien». «Veo que todos, desde los propios agricultores, trabajadores, organizaciones agrarias, la administración estamos haciendo un trabajo de coordinación importante y, a día de hoy, podemos decir que ahí no hay ningún brote activo en Castilla-La Mancha».

Algo que esperan que se repita en la recogida de aceituna porque consideran que es «fundamental» para evitar cualquier brote y «no tener que parar una explotación agraria en plena recogida».

Esta es una de las prioridades de la organización, desde donde prevén que la de la aceituna será «una mejor campaña que la del año pasado» porque en el caso concreto de la comarca de Talavera «hubo explotaciones que recogieron un 90% menos de lo que es habitual». Este año se espera una producción «media», si bien todo dependerá del tiempo.

Por su parte, la presidenta provincial de Asaja Toledo, Blanca Corroto, se refirió también al final de la campaña de la vendimia, «la más importante en Toledo después de la aceituna», y destacó de igual manera que, «afortunadamente, no ha habido casos de Covid». Según dijo, la producción este año será un 30% más  de lo habitual «y todo se está desarrollando bien». Sin embargo, incidió también en el «problema de los precios», algo que recientemente se ha reivindicado en Socuéllamos con una protesta en la que los agricultores tiraron un remolque de uva para reivindicar unos precios justos y un futuro digno para el sector.

«Ahora mismo estamos teniendo unos precios de uva como en el año 1977», dijo, incidiendo en que, sin embargo, los costes de producción han ido subiendo a lo largo de todos estos años. «Esto es una ruina», lamentó Corroto, quien añadió que «o se empieza a vender más caro o al final llevamos tres años con este de crisis y esto al final va a obligar a mucha gente a abandonar el sector».

En cuanto a la campaña de la recogida de la aceituna, desde Asaja prevén que será «bastante más grande de la del año pasado, que fue criminal», si bien será «media alta».

Ante esta nueva campaña, desde el sector siguen reivindicando, como lo hacían en las calles antes de la pandemia, precios justos para el sector. Sobre esta cuestión, la secretaria provincial de UPA indicó que en cooperativas de la zona donde ha habido cooperativas de la zona donde se ha liquidado a 2 euros el kilo de aceite de oliva virgen extra. «Eso es una ruina absoluta para los agricultores», recalcó Fernández, haciendo hincapié en la necesidad de «cumplir la ley de la cadena alimentaria» que marca «que los productores no pueden recibir por su producto menos de lo que a ellos les cuesta producir». En el caso del AOVE, señaló que el Ministerio establece que, de media, producir un kilo de AOVE en olivar tradicional, como es el caso del de la comarca talaverana, cuesta 2,70 euros. Al estar vendiéndose sin embargo a 2 euros, «las explotaciones no tienen rentabilidad» y, por ello recalcó que «no se puede seguir consintiendo» que el dinero que pagan los consumidores por el producto en el mercado « a los productores nunca les llega».

Además, desde UPA aseguran no entender cómo sucede cuando en la última campaña la cantidad de AOVE almacenado es menor que otras veces, las exportaciones van a más y, durante la pandemia, los españoles, consumen más aceite del país. «Aumenta el consumo, aumentan las exportaciones, bajan las existencias  resulta que el agricultor sigue recibiendo muy por debajo de lo que cuesta producir», reiteró Fernández, denunciando en este sentido la «especulación» existente y «con la que hay que terminar».

Ganadería. En lo que respecta a la ganadería, la responsable de UPA recordó los problemas a los que han tenido que hacer frente durante la pandemia sectores como el del ovino y del caprino, dado que su producción «mayoritariamente va destinada a la restauración», Su cierre se tradujo en pérdida de negocio para estos sectores, y ahora «dependerá mucho de lo que pase en los próximos meses». «Si se tienen que seguir tomando medidas donde la hostelería y la restauración tiene que cerrar, evidentemente habrá muchas producciones, como ha pasado, que se queden en las explotaciones y no se las pueda dar salida».

De momento, dijo, «está la cosa más relajada y más estable que hace dos o tres meses», si bien en cuanto a precios se mantienen las mismas reivindicaciones puesto que se dan los mismos del año 1996, pese a que los costes de producción se han ido incrementando en estos años. «Todos los costes de producción suben mientras los precios que reciben los productores baja o se estabiliza como se tenía hace 25 años», reiteró Fernández.

La responsable de UPAToledo manifestó que la ganadería «ha sufrido a nivel económico unas pérdidas tremendas» durante esta pandemia, en la que si bien «todos los sectores están por debajo de costes, la ganadería ha tenido un problema importante porque los animales no salían, no ha habido consumo y los ganaderos lo han pasado realmente mal». «Ahora parece que está un poco más relajado el tema pero no está ni mucho menos para tirar cohetes», indicó.

Al respecto, se refirió a la próxima reforma de la PAC para ver cuál es el presupuesto, a quién van a ir dirigidas las ayudas y «si se va a primer de verdad a los profesionales del sector», además de las medidas que deberán cumplir para acogerse a esas ayudas.

En esta misma línea se pronunció la presidenta de Asaja, quien señaló que el ovino «parece que se ha recuperado algo con la apertura de restaurantes este verano», si bien, con las nuevas restricciones, esta recuperación «no es para tirar cohetes».

«Ahora mismo está mal todo, no hay sector que se defienda, da igual vino, hortalizas, ganadería, aceite», dijo Corroto, quien reiteró que se está vendiendo «por debajo de costes de producción, a pérdidas».

Por todo, se mantienen las reivindicaciones de hace años, ya que no ha habido avances en cuanto a precios, y desde Asaja reclaman también en este sentido «que la cadena alimentaria se ponga para no poder vender por debajo de los costes de producción».