Sonsoles Arnao, Premio Extraordinario de Máster de la UCLM

Leticia G. Colao
-

La exconcejala logra una media de 9,23 en sus estudios de investigación de Antropología Aplicada, que completa con un Trabajo Fin de Master sobre artesanías populares y los bordados de Lagartera.

Sonsoles Arnao, Premio Extraordinario de Máster de la UCLM - Foto: Manu Reino

La talaverana Sonsoles Arnao, exconcejala del Ayuntamiento de Talavera, ha sido reconocida como el mejor expediente académico en Máster de la Universidad de Castilla-La Mancha en el curso 2019-2020. El Premio Extraordinario Fin de Estudios corresponde a su trabajo tras un año profundizando en el ‘Máster Universitario de Investigación en Antropología Aplicada: Entre la Diversidad y la Globalización’, con una nota media de expediente de 9,23.

Arnao comenzó este estudio de posgrado en 2019 poco después de quedarse sin trabajo, tras las elecciones locales, donde concurrió como candidata a la Alcaldía del Ayuntamiento, por Ahora Talavera. En la legislatura anterior, fue la portavoz del Grupo Municipal de Ganemos.

Fue el momento perfecto para completar unos estudios de Antropología, que siempre le han «apasionado». Sonsoles Arnao es diplomada en Trabajo Social y licenciada en Antropología Social y Cultural por la UCLM. Actualmente, también es columnista de La Tribuna.

Arnao explica que este posgrado profundiza en la disciplina de la Antropología «y en todos los cambios que se producen a nivel global en distintas áreas, muy características en el estudio antropológico». Así, intenta ir más allá del concepto de globalización asociado al ámbito económico, y lo analiza desde una perspectiva antropológica, «el concepto desde los orígenes de la humanidad, siempre en constante evolución».

Por ello, la visión práctica de la antropología se aplica a otras áreas de trabajo como la sanidad, la educación, las migraciones o las empresas, que están invirtiendo en los últimos tiempos en las ciencias humanas o sociales. En este sentido, se valora la metodología de esta disciplina, porque sus singulares métodos de investigación, el trabajo de campo, la observación participante y el estudio etnográfico, «nos permite tener una mirada más holística y con más matices de la realidad social».

Pero en lo que más tiempo ha invertido y más satisfacciones le ha dejado ha sido el Trabajo Fin de Máster (TFM), donde además de poner el broche al curso, el alumno debe acreditar un perfil investigador clave en este posgrado. El trabajo, tutorizado por «el brillante antropólogo» Juan Antonio Flores Martos, «combina análisis documental e investigación pura y dura en la parte más antropológica y etnográfica que es hacer un trabajo de campo sobre el terreno».

TRABAJO DE CAMPO. Arnao lo tenía claro, y el resultado ha sido de 10. «Me planteé un trabajo que tuviera conexión con nuestra comarca y ciudad, porque me interesa poner esos conocimientos de antropología para investigar sobre nuestra realidad más cercana, y aspectos donde estén implicadas las mujeres, en aquellas cuestiones más olvidadas o que de alguna manera suelen ser arrinconadas en los estudios sociales». De ahí partió un estudio complejo y profundo sobre los trabajos de artesanías populares con especial hincapié en las labranderas de Lagartera.

En su estudio, analizó el impacto de la globalización, el proceso de liberalización de la economía o la estandarización del consumo, «y el impacto negativo en las últimas décadas para la producción artesana». No obstante, también estudia el fenómeno nacido en los últimos tiempos que comienza a valorar  todo lo referente a la artesanía.

En este aspecto tiene mucho que decir el conocido interiorista Tomás Alía, lagarterano, embajador de la Cerámica de Talavera y fiel defensor de las artesanías como excelencia máxima, a quien Arnao entrevistó para su trabajo. También conoció a su madre, Pepita Alía, «mujer muy interesante que ha tenido un papel muy destacado en la promoción y conservación de esta artesanía». Junto a ellos, habló con otras labranderas que han vivido el cambio generado por el tiempo a sus magistrales bordados.

A pesar de la pandemia y las restricciones, Arnao esperó al verano para investigar a pie de campo, desplazándose a Lagartera y hablando con las mujeres, grandes conservadoras de un legado de siglos, productoras y distribuidoras viajando por toda España vendiendo su artesanía. Junto a ellas conoció qué dificultades hay en la artesanía para poder sobrevivir, los problemas para encontrar relevo generacional y por qué, tradicionalmente, se ha denostado la artesanía frente al arte. «El arte tiene un lugar privilegiado en la cultura, pero la artesanía parece que se menosprecia», lo que se justifica, en parte, por su carácter utilitario. En las labores de Lagartera tiene este aspecto utilitario y además doméstico, centrado en el ajuar y en su uso como vestimenta, también perdido.

En la perspectiva aplicada del máster, examina de qué manera se puede trabajar a nivel de la administración y la industria para crear una relación con la artesanía popular, y recuerda como en otros países como México o Colombia, diseños de artesanías vivas se conjugan a la perfección en el mundo de la moda.

Sobre el reconocimiento universitario a nivel regional, se muestra humilde. «No sé si soy merecedora de un premio así, pero es vedad que es una recompensa a un esfuerzo que ha valido la pena». Especialmente, porque lo ha realizado en un tiempo incierto, «con una vuelta a los estudios, y conciliando la crianza de mis hijos y la búsqueda de trabajo… por todo ello, este premio sienta mucho mejor».