El Ayuntamiento tiene muy en cuenta el cementerio todos los años a la hora de elaborar los presupuestos municipales, ya que siempre figura alguna partida al margen de los gastos de mantenimiento y otros derivados del servicio para que las instalaciones estén en el mejor estado posible, tratándose además de un Bien de Interés Cultural «y de uno de los cementerios neogóticos más bonitos de España». En este caso, la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, acudió esta mañana al camposanto para comprobar el resultado de la restauración que se ha llevado a cabo del almacén, un espacio necesario para el día a día de los trabajadores.
El mal estado de estas instalaciones, situadas a la entrada del cementerio, ha obligado a realizar una inversión de 150.000 euros, destinada principalmente a la reparación de grietas y la recuperación de una cubierta que no reunía condiciones y exigía impermeabilizarla y sustituir las tejas originales, que contaban con una antigüedad de 130 años. Además, el arquitecto Javier Rojo resalta dentro de estos trabajos la restauración de la fachada del almacén, en la que se ha recuperado «la verdugada toledana» que imprime una cuidada estética «y recupera el encanto de una fachada simétrica».
Más actuaciones. A esta reciente restauración se sumará en breve otra actuación en la entrada del cementerio, una zona verde muy castigada todavía por los efectos del temporal Filomena del pasado enero, que también afectó en buena medida a los cipreses, que poco a poco se van recuperando. Estos trabajos de jardinería se iniciarán de inmediato y en coordinación con la Concejalía de Servicios Sociales. Según avanzó la concejala del área, Marta Medina, la actuación se realizará a través del PLIS (Plan Local de Integración Social), de la misma manera que se llevó a cabo hace tiempo en un parterre en el barrio del Polígono. En principio, la obra será breve y Medina confía en que pueda estar lista de cara al Día de los Santos, el 1 de noviembre.
El almacén del cementerio, restaurado por 150.000 euros - Foto: Yolanda LanchaAdemás, también se ha puesto en marcha la licitación para recuperar los patios de San Andrés y San Antonio, una obra que parte con un precio que ronda los 90.000 euros. En ambos espacios es necesario intervenir en deberá intervenir en los espacios de enterramiento, viales, paseos interiores, edificaciones, cerramientos, obras de fábrica y drenajes. También está previsto que se realicen mejoras de seguridad y de señalización y se coloque césped artificial en las áreas que lo requiera como parte de la dignificación de ambas zonas, que completará al adoquinado que mantendrán otras. En total, el Ayuntamiento se ha gastado más de 500.000 euros en actuaciones en el cementerio en los últimos seis años.
Más espacio. El cementerio dispone de pocas sepulturas de suelo a pesar de las ampliaciones, una problemática sobre la que está trabajando el servicio de Patrimonio desde hace meses. En este sentido, Tolón subrayó que se están poniendo en contacto con familiares de tumbas abandonadas desde hace 80 ó 100 años para conocer si quieren renovarlas y pagar el alquiler o pueden ser reaprovechadas ante la falta de sepulturas de suelo a corto plazo. En principio, se está trabajando con 35 tumbas, pero la alcaldesa ya comentó recientemente que puede que haya entre 100 ó 200 tumbas abandonadas en el cementerio.
Respecto la necesidad de ganar espacio de cara al futuro, Tolón no comentó nada, lo único que sí explicó es que la pandemia «ha dado un golpe duro» y ha obligado al Ayuntamiento a trabajar desde el primer momento. Si bien, el cementerio precisa una mejora en la organización interna o una ampliación para continuar prestando su servicio en un tiempo, pero habrá que esperar a que se conozca el avance del POM para saber la fórmula elegida porque ahora no podría realizarse, ya que la ciudad se guía por el Plan General del 86 tras la anulación del POM en los tribunales, y no contemplaba ninguna ampliación para el cementerio.