"La muerte de un ser querido es muy difícil de sobrellevar"

Juana Samanes
-

Amante de los retos. El conocido intérprete dice que, a estas alturas de la profesión, se aburre si los trabajos que le ofrecen no le plantean dificultades

"La muerte de un ser querido es muy difícil de sobrellevar"

Los 50 años que cumplirá Ernesto Alterio el próximo 25 de septiembre le han sentado muy bien profesionalmente. Porque su veteranía en la actuación le han servido para encarar personajes con mucha carga interpretativa, como el protagonista de la última película de Achero Mañas: Un mundo normal. Un hombre que se enfrenta a la muerte inesperada de su madre y que se ve abocado a hacer cosas que nunca imaginó.

 

Su personaje en Un mundo normal, es un hombre capaz de hacer cualquier cosa por amor a su madre, incluso saltarse la ley para cumplir sus últimas voluntades, un asunto de rabiosa actualidad, ahora mismo, cuando tantos hijos no han podido ni despedirse de sus padres por esa cruel pandemia.
Sí, se estrena esta película en un momento justo, cuando entendemos lo importante que son esos ritos de despedida a un ser querido. Yo entiendo que son fundamentales porque nos ayudan a poner palabras, un lugar adonde ir a llorar y ahora lo hemos constatado más cuando tanta gente no ha podido despedirse de sus seres queridos. Eso genera un agujero emocional muy difícil de sobrellevar.

En esta película actúa de forma muy natural, tanto es así que su personaje resulta muy creíble a pesar de los múltiples registros ¿Cómo lo logró?
Este personaje era un auténtico desafío por el momento vital en que se encuentra. ¿Cómo lograr hacer atractivo un hombre que está melancólico, en horas bajas, y que puede llegar a ser aburrido?. Y, además, luego le ocurre lo que nadie queremos. Fundamentalmente estaba la propuesta del director, Achero Mañas, que era un ejercicio de sinceridad donde no se podía ver ninguna afectación y había que generar una actuación desprovista de toda impostura. Esto era uno de los desafíos pero ha sido muy rico para mí tanto artística como personalmente. 

 

Achero Mañas ha comentado que ha introducido vivencias personales en el guion de la película, ¿usted se ha sentido identificado con alguna faceta de su personaje?
Me identifico con algunas cosas, con su pasión, con que es un hombre vinculado al arte, al mundo del teatro, porque yo he crecido en los escenarios. Pero no tengo la misma percepción ni soy tan categórico en muchas cosas, como ese discurso contra la televisión, pero lo entiendo en mi personaje.

 

En la película tiene una especial complicidad con la joven actriz Gala Amyach. Supongo que ha trabajado con ella con total libertad a pesar de que, quizás, al ser la hija del director en algún momento le pudo preocupar o ¿no?
A priori me daba respeto, porque es una historia muy personal de Achero Mañas, donde se abre en canal, se implica en lo que hace y, encima, trabajo con su hija. Pero, por otro lado, sentía que era una oportunidad de vivir una experiencia única, donde estoy interpretando una especie de alter ego de Achero. Al final, se generó algo muy amoroso entre todos y yo tenía la sensación de formar parte de su familia. 

 

¿Cómo fue el rodaje de esta película, que ha transcurrido en parte en la carretera entre Madrid y Valencia?
A mí me entretuvo. Desde que leí el guión ya me imaginaba que no iba a ser sencillo, porque había mucha carretera, había en la película un perro, infinidad de cosas que lo complejizan. Pero yo he llegado a un momento de mi profesión que me aburro si no se me plantean retos, son cosas que “a mi me ponen”. Necesito este tipo de estímulo.