Toledo participa por segunda vez este mes acogiendo una nueva edición de la ‘Green Week 2020’ que organiza la Fundación Ecolec con el apoyo del Ayuntamiento de Toledo y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha con el fin de concienciar e incentivar el reciclaje responsable de residuos RAEE, es decir, residuos electrónicos y eléctricos. Una de las actividades programadas en la capital regional tiene lugar hoy en el paseo Federico García Lorca del Polígono. En esta ubicación se ha instalado un punto de información y recogida de residuos RAEE con horario de atención al público de 10:00 a 14:00 horas, como ya ocurrió el pasado miércoles, 16 de septiembre, en el remonte mecánico del Miradero.
Los ciudadanos han podido depositar en este punto pequeños aparatos electrodomésticos, por ejemplo, tostadoras, batidoras, móviles, secadores de pelo, cepillos eléctricos y todos aquellos sin ninguna dimensión exterior superior a los 50 centímetros. La actividad se ha desarrollado con la adopción de las medidas preventivas de la Covid-19 establecidas por las autoridades sanitarias.
Así, la Fundación Ecolec y el Ayuntamiento de Toledo en su apuesta por el reciclaje responsable de RAEE regresan con la cuarta edición de la ‘Green Week 2020’ tras el éxito de las tres primeras ediciones. De esta forma, otro año más y mediante el lema ‘Este otoño, renuévate y recicla’, desde la Fundación se pone en valor la importancia del reciclaje de RAEE para el medio ambiente en particular y para la vida en general ya que un correcto tratamiento de éstos evita efectos nocivos para la salud, además de un impacto visual negativo.
El objetivo de la campaña es que estos residuos se depositen en los lugares aptos para ello, en los puntos habilitados por las diferentes administraciones públicas o en los puntos informativos de la campaña. Hay que tener en cuenta que una vez que los aparatos eléctricos y electrónicos quedan inservibles guardarlos en un cajón o amontonarlos en un trastero carecen de valor. Sin embargo, es importantísima la función que cumplen cuando se reciclan, ya que pueden disfrutar de una nueva vida, llegando a reutilizarse hasta el 99% de sus piezas.
Como explican desde la organización, todos los electrodomésticos están fabricados con materias primas obtenidas del medio ambiente, muchas de ellas no renovables. Sin embargo, a través del reciclaje, materiales como el cobre o el aluminio, pueden ser reutilizados en otros nuevos productos. De este modo, se contribuye a darles una nueva vida y a la preservación de los mismos, evitando el daño medioambiental que se produce en la extracción de estos materiales necesarios, y un ahorro de energía. Y es que hasta un 70 por ciento de un aparato puede transformarse en materias primas aprovechables, un porcentaje bastante alto para dar vida y no restarla al medio ambiente.