La pandemia de la Covid-19 puso en marzo de 2020 patas arriba la vida de los españoles. Y sigue amargando las ilusiones de una población que encaraba las Navidades con ganas de corregir los 20 meses anteriores. Lamentablemente, el recelo por el aumento de los casos de coronavirus se reveló como verdad desde mediados de diciembre, y los ayuntamientos han claudicado. Nanay a las fiestas de Nochevieja.

El Ayuntamiento de Yepes ha usado el verbo aplazar para referirse a la suspensión de la fiesta de las preúvas, así como una sesión de pinchadiscos y otra actuación musical para la madrugada. «A pesar de no haber ningún tipo de restricción decretado por el Gobierno de España, ni del Gobierno de Castilla la Mancha tanto en eventos interiores o en exteriores como es nuestro caso, haciendo un ejercicio de responsabilidad, en prevención por el avance de la variante Omicrón», detallaba el Consistorio de unos 5.200 empadronados.

El Ayuntamiento de El Viso de San Juan informó también de la cancelación de la fiesta de fin de año prevista en la Casa de la Cultura por los casos de Covid-19. Asimismo, la Mayordomía del Santísimo Cristo de la Buena Muerte de la localidad sagreña tomó una decisión igual sobre la preúvas.

Por su parte, el Ayuntamiento de Numancia de la Sagra comunicó ayer a los vecinos la suspensión de la discoteca de fin de año. «Sabemos que son días de celebración y de reuniones con amigos y familiares, pero queremos pediros que, en la medida de lo posible, seamos responsables para intentar aliviar la presión sobre la atención primaria», advertía.

Por su parte, el Centro de Información Juvenil de Santa Cruz de la Zarza anunció la suspensión de las campanadas infantiles, un acto lúdico que estaba previsto a las 12 de la mañana del día 31 en la plaza de la Constitución. «Nos duele mucho tomar esta decisión, pero miramos con optimismo al 2022 y prometemos que dentro de un año, serán para los más pequeños, las mejores campanadas», lamentaban.

El Ayuntamiento de Oropesa ha transmitido a los vecinos la cancelación de las preúvas de las 12 de la mañana en la plaza a causa del aumento de los contagios.

Las San Silvestre suponen parte del paisaje del último día del año. Pero este acabará mermado. Por ejemplo, Navalcán ha informado de la suspensión de la carrera por las recomendaciones sanitarias.

Del mismo modo, Villacañas claudicó y suspendió ayer la carrera popular. El reglamento de la prueba ya incluía la devolución del importe la inscripción por razones de la pandemia. Pues eso.