El día 15 de agosto, solemnidad de la Asunción de la Bienaventurada Virgen María, el arzobispo de Toledo y primado de España, Francisco Cerro, donará un pectoral a la patrona de la ciudad de Toledo en la Santa Misa que presidirá en la Catedral con motivo de su fiesta. «La Virgen del Sagrario es la imagen que nos lleva a la Eucarista, al Corpus Christi», explica el arzobispado en una nota de prensa. Con este gesto filial, el prelado toledano implora el cese definitivo de la pandemia.
De igual modo, el arzobispo pide que, en estos días de celebraciones marianas y de fiestas patronales de muchas localidades de la archidiócesis, los fieles rueguen a Santa María, en sus plegarias, para que acabe la pandemia y no se prolongue más este dolor en las familias.
Contra las «burlas» a María. «Todas las imágenes de la Virgen María son siempre, para los católicos, los iconos queridos que nos recuerdan la protección de nuestra Madre del cielo, a la que siempre profesamos cariño y devoción», asegura la institución diocesana metropolitana. «Por eso pedimos a todos el respeto debido hacia la figura de Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra. Nunca es tolerable que bajo el amparo de una falsa libertad de expresión, con burlas a nuestras realidades sagradas, se hieran gravemente los sentimientos religiosos de miles de ciudadanos».