Solo han pasado siete días. El pasado jueves Castilla-La Mancha tenía una tasa de incidencia a 14 días que no llegaba a los 400 casos por 100.000 habitantes, pero ayer ya superaba los 1.000. La proporción entre la tasa a 7 días y a 14 estaba hace una semana apenas por encima del 50%, que era una buena señal, pero en estos momentos roza el 70%, lo que indica que los casos van a seguir creciendo. El presidente de la Junta, Emiliano García-Page avisó esta mañana de que «el mes de enero no va a ser fácil». 

Por eso el Gobierno regional ha decidido tomar nuevas medidas  que se van a centrar en proteger a los más vulnerables. En este sentido, Page anunció ayer que se va a iniciar la vacunación con la dosis de refuerzo para grandes dependientes y sus cuidadores, con independencia de su edad. También se incrementan los controles preventivos en las residencias. Las visitas se limitarán a una a la semana y de un familiar. También se quiere hacer obligatorios los test de antígenos para los trabajadores, con uno a la semana si el empleado está vacunado y dos a la semana si el empleado no está vacunado. El presidente de la Junta expuso que la media de fallecimiento en esta ola está en los 83,7 años: «Está muy claro los colectivos y trabajadores que tenemos que proteger de manera muy especial».  

Page también avanzó medidas para descongestionar los centros sanitarios y los hospitales. Para ello se van a habilitar nueve puntos masivos para hacer pruebas. Estarán tres en Ciudad Real, dos en Guadalajara y Toledo y uno en Albacete y Cuenca. Además Castilla-La Mancha contará con unidades militares de apoyo para el rastreo de casos y la vacunación. Confirmó que seguirán  los centros de vacunación masiva. El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, expuso que «estamos vacunando a tope, todo lo que podemos, todo lo que nos llega». 

Esta nueva variante, que está dejando picos de contagio, está teniendo mucha menos incidencia en la hospitalización. Si en los peores momentos de la pandemia esa tasa de hospitalización estaba en el 10% de los casos positivos, ahora ha bajado al 1,15%. Eso hace que en comparación con el mismo día del año pasado, haya una tasa de incidencia once veces mayor, pero ahora la ocupación de camas de hospital sea la mitad. 

Bajas, colegios y Nochevieja. Page se pronunció sobre algunos de los temas que ahora están en debate. Se mostró a favor de recortar los días de confinamiento para los positivos por Covid. «Creo que en un momento determinado tendrá que plantearse entre tres y cinco días», apuntó. Al respecto, señaló que «la repercusión económica y social es muy desproporcionada para las consecuencias hospitalarias». 

Por sus palabras, dejó claro que no apuesta por retrasar la vuelta a las aulas, pues dice que si en estos momentos no hay restricciones a la hostelería en regiones como Castilla-La Mancha o límites a la movilidad, «cuanto menos suspender un servicio público tan esencial».

Y para pasado mañana, 31 de diciembre, apuntó: «No puedo decir a la gente que no se celebre la Nochevieja, pero si se trata de celebrarla, hay que hacerlo con mucha prudencia, lo contrario puede ser arrepentirse». Si en los peores momentos de la pandemia esa tasa de hospitalización estaba en el 10% de los casos positivos, ahora ha bajado al 1,15%.