Sonia Gómez, presidenta de la Asociación Regional de Guías de Castilla La Mancha

indica que el colectivo va recuperando la actividad poco a poco pero todavía echan en falta la presencia de los turistas extranjeros, en especial los grupos organizados que son su principal fuente de trabajo. Mientras tanto destaca que los guías profesionales empiezan también a ser requeridos por el turistas español y recalca que todos los integrantes de su asociación están abiertos 24 horas siete días a la semana para atender la demanda.

En cuanto a los exámenes que acrediten la categoría de guía oficial en Castilla-La Mancha dice que siguen a la espera de que la Junta de Comunidades realice la convocatoria que quedó pendiente antes de la pandemia.

La preocupación de estos profesionales sigue siendo que hay gente sin formar dando visitas «denostando el patrimonio» por falta de formación y la asociación lo que quiere es precisamente establecer un mecanismo de habilitación para ofrecer turismo de calidad, por lo que «instamos a la Junta a retomar las conversaciones» y se convoquen los exámenes y se pongan a funcionar las normas «que se suponen que están escritas».