Toledo se mantiene como la provincia más castigada por la pandemia de toda Castilla-La Mancha. En las últimas 24 horas ha registrado el 75% del total de fallecimientos a consecuencia del coronavirus en la región, en concreto tres de los cuatro óbitos confirmados por la Junta a través de su Dirección General de Salud Pública.

La provincia acumula desde el mes de marzo de 2020 un total de 2.107 muertes por Covid-19 de las 5.803 que se han contabilizado en toda Castilla-La Mancha. Se trata del 36,4% de la mortalidad de la comunidad autónoma frente al 29,1% de Ciudad Real, el 15,1% de Albacete, o el 10,2% y el 9,2% de Guadalajara y Cuenca, respectivamente.

A pesar del descenso de la tercera ola, en la provincia comienzan a verse indicadores que hacen pensar en el comienzo de una cuarta oleada de coronavirus. Y es que, un día más, desde hace ya una semana, los principales registros para analizar el avance del virus se mantienen en dinámica ascendente.

Así, en la jornada de ayer se confirmaron 66 nuevos contagios en Toledo (el 40,9% del total de la comunidad) y las hospitalizaciones en cama convencional siguieron subiendo. La provincia cuenta ya con el 53% de todos los pacientes ingresados por coronavirus en Castilla-La Mancha, y la capital regional es la que mayor presión asistencial registra por este tipo de pacientes. Y es que, en el Virgen de la Salud hay ahora mismo 72 personas con un cuadro agudo por Covid-19.

El único dato que se mantiene es el de las camas UCI. Las unidades de Cuidados Intensivos de Toledo tienen 11 pacientes intubados desde hace dos jornadas. Se trata del 28% del total de críticos de toda la región.

Por último, a pesar de que la pandemia se ha frenado bruscamente en las residencias de mayores y otros centros sociosanitarios de Castilla-La Mancha, actualmente la Junta tiene confirmados tres casos de coronavirus entre residentes en otros tantos centros de este tipo. Todos ellos son de la provincia de Toledo.