El entrenador del Soliss Talavera, Rubén Barrios, se congratuló del segundo encuentro consecutivo en el Primero de Mayo ya que «a nivel de moral y de intensidad es positivo». Pero por encima de todo destacó que «en un año muy, muy complicado, en cuanto al Covid y también a nivel deportivo ya que hemos tenido altibajos, estamos hablando de que a falta de tres jornadas el equipo mantiene esa ambición y esa posibilidad de poder entrar en el ‘play-off’». Por tanto, «te ves en la recta final de competición con posibilidades y es gratificante porque estás luchando por un objetivo con lo que se pueden mantener la intensidad en los entrenamientos y la calidad del trabajo». En definitiva, que «dentro de este año tan complicado, estamos dando el callo hasta el final».

El conjunto talaverano buscará este sábado contra Mengíbar su tercera victoria consecutiva. La mejoría de los hombres de Rubén Barrios es evidente y, en este sentido, uno de los aspectos fundamentales ha sido el defensivo que «hemos buscado siempre que fuera nuestra identidad, es decir, ser un equipo aguerrido, fuerte y que al rival le cueste meternos gol; ha habido partidos este año en los que no lo hemos conseguido por falta de determinación o malas decisiones competitivas». En este sentido, puso de manifiesto que «es nuestro camino» porque «son muchos los beneficios de marcadores bajos».
Sobre el rival de esta jornada, Mengíbar, explicó que «lleva muchos años jugando igual, tiene una identidad de un equipo muy molesto, que juega también a marcadores muy bajos y que intenta crecer desde no encajar goles». Por tanto, «esperamos un partido un poquito áspero en el sentido de dos equipos que intentan cometer el menor número de errores posible». Aunque el técnico está convencido de que «si conseguimos imponer nuestra identidad de juego y que todo el grupo sea un equipo, podemos sacar algo positivo». Aseguró que «será un partido muy bonito para que los espectadores disfruten de dos equipos de ‘play-off’». La plantilla está al completo.