Con una media de 130 cabezas de ganado por explotación, las granjas de vacuno de leche de Castilla-la Mancha parecen muy alejadas de las criticadas macrogranjas. Puestas en el centro de la polémica por las críticas declaraciones del ministro de Consumo, Alberto Garzón, la polémica se ha amplificado y multiplicado en los últimos días por la confrontación política, sobre todo entre PSOEy PP.

Desde el sector, Africama se queja de una generalización que no se corresponde con la realidad de las explotaciones ganaderas de la región:«Generalizar sin dar datos me parece bastante osado. Hay que conocer la realidad diaria de las explotaciones y la particular de cada una de ellas, para poner en tela de juicio la gestión y el trato de los profesionales con sus animales», afirmaba ayer a preguntas de los medios de comunicación el secretario ejecutivo de Africama, Diego Jerónimo Fernández.

El representante de Africama señalaba que no entiende que sea el propio Ministerio de Consumo el que genere las dudas sobre el sector ganadero. «En Castilla-La Mancha casi no existen macrogranjas, nosotros estamos más por el trato individual y personal que se hace en cada una de las granjas a los animales», afirmaba el representante de Africama, que aseguraba además que las explotaciones están sometidas a férreos procedimientos de certificación. «La mayoría de las granjas de Castilla-la Mancha están certificadas con el Welfare Quality, que es el sistema de certificación más exigente para bienestar animal», aseguraba al respecto.