'Queda prohibido el acceso a estas instalaciones' o 'Precintado por la Policía Local' son algunos de los carteles que presentan los vehículos y la sede de la Agrupación Municipal de Protección Civil en Toledo. La realidad ahora mismo es que la ciudad no puede prestar este servicio tras la dimisión de cuatro personas que representaban a la dirección de esta agrupación de voluntarios. Aproximadamente, el servicio lleva clausurado desde finales del mes de octubre.   A la espera de que el Consistorio encuentre nuevos voluntarios que quieran dirigir Protección Civil de Toledo, la ciudad no podrá contar con este servicio.

Según ha tenido acceso La Tribuna, esta situación se habría producido fruto de una mala relación entre los dirigentes de la agrupación y el propio ayuntamiento, que para solucionar las malas relaciones entre ambas partes se optó  por dar por terminada su colaboración. Ya a finales de abril, los integrantes de la Agrupación iniciaron una huelga para «reclamar los medios materiales» que consideraban  necesarios para el «buen funcionamiento» de este servicio ciudadano. Días después, se desconvocaba la protesta tras el compromiso del equipo de Gobierno de renovar las dos motos con las que cuentan estos voluntarios, así como la ambulancia.

Un concejal del Ayuntamiento, en concreto del Grupo Municipal Popular, se hacía eco de este conflicto en sus redes sociales. Se trata de Pablo José Corrales, que en dicha publicación lamentaba profundamente esta desvinculación de los responsables de la agrupación, y achacaba la dimisión de estos a las «malas condiciones» en las que tenían que prestar sus servicios. Corrales citaba textualmente: «fugas en las bajantes de aguas fecales; trabas para adquirir el material del servicio; vehículos inutilizables por su antigüedad; azulejos que se caen con mirarlos...». Una información que choca con la contrastada por La Tribuna, que no desmiente que la sede sea antigua, pero que sí afirmaba que las quejas eran excesivas, y más aún, después de las dotaciones que el Ayuntamiento ha aportado a la agrupación de Protección Civil en las últimas fechas.

Sea como fuere, lo único cierto en estos momentos es que la capital de Castilla-La Mancha no cuenta con servicio de Protección Civil y que no hay fecha en el horizonte para poder volver a recuperar un cuerpo de voluntarios que tanto servicio presta a la ciudad.