Toledo disfrutará de una nueva área comercial dentro de algunos meses. El proyecto de reforma interior en una parcela privada que correspondía al Complejo Hotel Beatriz y que recientemente ha sido vendida a ‘López Real Inversiones’ obligó ayer a los grupos municipales a votar sobre esta futura actuación que ampliará la oferta comercial en la ciudad y dispondrá también de una gasolinera. En este caso, no hubo muchas objeciones, puesto que se trata de un proyecto en una parcela privada que cumple «con la legalidad», como manifestó la concejala de Ciudadanos, Araceli de la Calle, y salió adelante a pesar de las pegas de IU-Podemos, ya que el grupo no ve útil ni claro que se desarrolle una nueva zona comercial en estos terrenos porque va en detrimento del pequeño comercio.

A Txema Fernández le llama la atención que se plantee un área comercial en la parcela en la que se encuentra una discoteca en desuso cuando se encuentra tan cerca el barrio de las Tres Culturas y continúa prácticamente sin servicios. En su opinión, el Ayuntamiento debería estar volcando en la defensa del pequeño comercio, que no puede competir de ninguna manera con las áreas comerciales, y recordó que no todas las que se plantean tienen buenos resultados, las únicas que sí lo están teniendo son las que han tenido respaldo del Ayuntamiento, como el Parque Comercial ‘La Abadía’ y ‘Luz del Tajo’, dado que el resto de centros comerciales privados -Buenavista, Zocoeuropa, Fusión o Santa Teresa- han fracasado.

«Hay que empezar a pensar en que la cohesión social no pasa por las grandes firmas comerciales y hay que ayudar a los vecinos en lo que necesitan», apuntó el portavoz de IU-Podemos, que no tiene muy claro aún si se planteará en esos casi 50.000 metros cuadrados disponibles un supermercado y una gasolinera.

A favor. El resto de los grupos se centró en la parte normativa del proyecto, dado que se trata de un proyecto empresarial en unos terrenos privados. Para el concejal del PP, Pablo Corrales, la actuación en esta zona de la ciudad «puede venirle bien a la zona para que sea más usada» y Toledo gana de paso «suelo dotacional».

De momento, la tramitación seguirá su curso en un Perim que no exige control arqueológico por su ubicación y porque se plantea una actuación edificatoria.