Ayudas públicas que favorecen la despoblación del Casco

C.M
-

El portavoz de IU, Txema Fernánde,z apreció que este dinero público concedido por el Consorcio «sostiene la viabilidad de empresas que se dedican a comerciar con el turismo»

Ayudas públicas que favorecen la despoblación del Casco

Con la «sensación agridulce» de «saber que la aprobación de las ayudas a los colectivos que más lo necesitan en estos momentos es lo que teníamos que hacer» el portavoz de Izquierda Unida no obvió señalar que aún así «es menos de lo que debemos hacer». Esta percepción se sustentó en la impresión de que estos apoyos «son pequeños parches» que si bien alivian la situación no constituyen una «solución continuada y eficaz». Y no lo es, en sus palabras, «porque muchos comerciantes del Casco continúan con sus establecimientos cerrados» y percibiendo «pequeñas ayudas» cuando las mayores cantidades de dinero público «van a las manos de la explotación».

Se refería Txema Fernández a lo ocurrido en el edificio rehabilitado por el Consorcio en el Callejón de Menores que va a destinarse «no a viviendas como se afirmó al principio, sino a apartamentos turísticos» que, dicho sea de paso, «favorecen las despoblación del Casco» y la especialización del comercio en el turismo». Este modelo «con el que no estamos de acuerdo» cronifica la enfermedad de «una ciudad pensada más para ser paseada que para ser habitada». Porque la ‘ocupación’ del turismo propicia la desaparición de la población y de los servicios a ella asociados.

Problema que se ve acrecentado  con la concesión de ayudas públicas por parte del Consorcio para «sostener la viabilidad de las empresas que se dedican a comerciar con los turistas» cuando a lo debería destinar sus fondos es a «subvenciona explícitamente la rehabilitación y la adaptación de edificios para destinarlo a vivienda habitual». El problema es que, aunque en las bases reguladoras de estas ayudas se excluyen los proyectos dedicados a usos terciarios, es que «no hay ninguna comisión de seguimiento que garantice que eso sea así». De ahí que sentenciara que «el modelo turístico que quiere mantener el Gobierno está reñido con el desarrollo de su ciudad» porque «prefiere salvar grandes negocios frente a los pequeños».

De hecho, y con el objetivo de planificar una ciudad amable y sostenible, el portavoz de IU aseveró que «si no garantizamos ciudades habitadas, no garantizamos futuro», razón por la que «el dinero público que se invierte sin criterio de mantener la población en el territorio no es un dinero gastado con eficiencia».

Sobre la calle Comercio. Apreciando que «no sabemos nada» de los planes municipales, Fernández apuntó la importancia de «contar los comerciales, que son los que más saben» y de «aprovechar» esta situación para «ensanchar el Casco histórico». Esto es, «para aprender a llegar a los mismos sitios por distintas calles» y diversificar los trazados.