La llegada del mes de agosto acogió este pasado fin de semana la tradicional operación salida de tráfico de verano. Las carreteras de todo el país, en espacial las autovías que emanan de la capital de España, se llenaron de vehículos para dirigirse a las residencias de verano o emprender las vacaciones. El coronavirus ha frenado la afluencia de coches, pero aun así se ha registrado un buen número de desplazamientos.

En las carreteras y autovías que atraviesan la provincia de Toledo, según los datos facilitados por la Dirección General de Tráfico, se han producido a lo largo de este pasado fin de semana un total de cinco accidentes, en los que no ha habido que lamentar ninguna víctima mortal ni ningún herido grave, aunque sí ocho de carácter leve.

Estos datos suponen un incremento del 150% en el número de siniestros respeto a la operación salida del pasado año, ya que en 2019 únicamente se registró un accidente en la operación del 1 de agosto. Con todo, se ha producido un descenso del 100% en los heridos graves (pasando de uno a cero) y un incremento del 700% en los leves con ocho heridos frente a uno del pasado año).

Además, los agentes de Tráfico han realizado este pasado fin de semana un total de 1.764 pruebas de alcoholemia en la provincia de Toledo, en las que 25 conductores dieron positivo, cinco de ellos menores de 25 años.