El Soliss Talavera gana en un último minuto de infarto (3-2)

David Lara/ADG
-

Dos goles de Adri y uno de Buitre dan la victoria a los talaveranos ante un Leganés que marcó el 3-2 a falta de sesenta segundos para el final

Adri Rivera marcó dos de los tres goles de su equipo. - Foto: Antonio A. Torres

FS Talavera: Rafa Luque, Anass, Carlitos, Adrián Rivera y Dani Montes. También jugaron Javi Amorós, Andrés, Porto, Caamaño, Manu Cebrián y Buitre.

CD Leganés: Gus, Borja Blanco, Chicho, Dela y Palomares. También jugaron Mimi, Juanma, Manu García, Pichi y Guille.

Árbitro: Roberto Amor y Borja Darriba (Comité guipuzcoano). Mostró tarjeta amarilla al local Dani Montes y a los visitantes Iker, Mimi, Gus, Manu García y Chicho.

Goles: 1-0 Adrián Rivera (min. 1). 1-1 Pichi (min. 23) 2-1 Buitre (min. 26) 3-1 Adrián Rivera (min. 38) 3-2 Mimi (min. 39)

Pabellón: Primero de Mayo. 1000 espectadores.

 

Salió ganando el Talavera y supo reaccionar cuando más lo precisó. Con la ventaja de un gol en el primer minuto, Juanma Marrube planificó una buena defensa para aguantar el resultado en la primera mitad. El empate del Leganés llegó al inicio de la segunda parte, pero Buitre devolvió la alegría en solo tres minutos. Se puso tres a uno el equipo local faltando dos minutos, aunque en sesenta segundos volvieron a estar a uno los pepineros. Un último minuto de infarto terminó con la grada volcada y una ajustada, pero bien cultivada victoria local que le permite seguir en los puestos cabeceros de la tabla.

Menos de un minuto necesitó el equipo cerámico para adelantarse en el marcador. Dani Montes buscó con un pase largo la espalda de la defensa leganense; allí estaba Adrián Rivera, que la bajó con el pecho y con un rápido giro se puso enfrente de la portería de Gus para mandar el balón al fondo de la red. Muy pronto se le puso cuesta arriba el encuentro al Leganés, que se volcó en ataque. Mimi tuvo la primera oportunidad para el conjunto visitante, sin suficiente peligro para superar la figura de Rafa Luque bajo palos. Cuando apenas corría el minuto diez de la primera mitad, Gus ya estaba jugando en campo contrario para tener el control del esférico e intentar igualar el partido. Borja Blanco tuvo protagonismo en ataque para los pepineros y Manu García, que salió como suplente, también probó varios disparos hacia la portería del Talavera.

El Leganés presionaba pero el Talavera era más determinante y sacaba más provecho de sus oportunidades de ataque. Manu Cebrían salió del banquillo para volver a ilusionar a la grada del Primero de Mayo con un testarazo que se topó con el larguero. Carlitos había puesto un centro perfecto para el salto de Cebrían, pero la ocasión se quedó en nada.

Caamaño también brilló en la primera mitad. Tuvo una clara opción en solitario frente a Gus, aunque el portero desvió el balón a córner. Poco después el argentino regateó con habilidad a un defensa para volver a quedarse solo contra el guardameta, pero desaprovechó la ocasión cediendo el balón a su compañero Carlitos, que no pudo encontrar el gol.

Despertó el Leganés al mover el banquillo. Juanma, el ex del Talavera, protagonizó la opción más clara del equipo visitante en este primer período. Fue tras un disparo de Guille que desvió Luque; le cayó el cuero a Juanma cuando apareció Porto, uno de los mejores del partido en defensa, para cortar el lanzamiento.

Tuvo las ideas claras el técnico local Juanma Marrube en todo momento. Planteó un partido desde una perspectiva ordenada y defensiva, pretendiendo sacar provecho de los contragolpes. Y así fue. Se marchó a los vestuarios por encima en el marcador manteniendo el bloque defensivo habiendo generado numerosas ocasiones de contraataque.

La segunda mitad fue más dinámica y alocada que la primera. Si al Talavera solo le hizo falta un minuto para marcar, al Leganés le sobraron tres para empatar el encuentro. Estaba siendo el mejor Adrián Rivera, el autor del gol que abrió el marcador, e incluso actuaba como un segundo entrenador dentro de la pista. Estaba destacando, pero un pase que se le quedó corto en su propio campo provocó que Pichi cortase el balón. Dudó Dani Montes en salir a por él, salió algo tarde Rafa Luque a tapar y Pichi no falló. El partido ya estaba en tablas.

Con el gol, el planteamiento de partido que llevaron los técnicos en la primera parte era previsible que variase. Era la primera vez que el marcador estaba igualado desde el minuto uno de encuentro. Pero en solo tres minutos, Buitre devolvió la alegría al Primero de Mayo. Robó el balón en tres cuartos de campo y soltó un cañón que difícilmente pudo ver Gus; cuando lo hizo ya estaba dentro de su portería.

De nuevo el equipo local se plantó en defensa y al Leganés le tocaba volcarse en ataque. A falta de diez minutos para el final, los hombres de Diego Gacimartín se lanzarían hacia el campo rival para atosigar al Talavera, pero poco tardó el encuentro en estar completamente roto. Anass regateó en dos ocasiones para generar oportunidades de uno contra uno, pero no afinó. En la otra portería Mimi se estrellaba con las manos de Luque. Buitre, que fue el mejor del Talavera en la segunda mitad, continuó poniendo a prueba a Gus. Un ir y venir de sucesivos ataques por parte de ambas escuadras, en las que tuvo una mayor decisión y cabeza el equipo cerámico.

Faltando cinco minutos, el Leganés estaba obligado a sacar al portero jugador. Borja Blanco aportó más posesión, pero la decisión de jugar sin un hombre bajo palos acabó perjudicando al equipo madrileño. Perdieron el balón y Luque lo lanzó con la mano hacia la portería contraria. In extremis, llegó a tiempo Rivera para poner la punta de la zapatilla y hacer que ese balón contase como el 3-1. Restaban dos minutos.

La hinchada se vino arriba y los gallos ya saboreaban la victoria. Cambió la situación con un balón de Pichi que empujó Mimi, callando -aunque solo unos segundos- al pabellón con el 3-2 en el penúltimo minuto. La grada volvió a rugir; en un último minuto frenético Pichi la tuvo para empatar, pero apareció Rafa Luque para parar la que sería la última acción peligrosa del partido.