Enrique Sánchez Lubián

En el Camino

Enrique Sánchez Lubián


Cada día, un Vietnam

09/02/2023

Tomo este titular de 'El apocalipsis aún no ha llegado a España', interesante análisis de Juan Rodríguez Teruel, profesor de Ciencia Política en la Universidad de Valencia, publicado el fin de semana en un diario nacional. En él, relata como el sentimiento de polarización se extiende entre nosotros, derivando en un creciente hastío ciudadano hacia la actividad política, lo cual no concuerda con la estabilidad que, pese a turbulencias como la derivada por la reforma de la ley del 'sólo sí es sí', el Gobierno de coalición ha mantenido desde 2020, aprobando un buen número de leyes y reformas.
A pesar de ser perversa, la estrategia de demonizar la política funciona a quienes la alientan. Avances como la revisión de las pensiones en un 8,5%, la subida del SMI, las reducciones del IVA en productos de primera necesidad y energéticos, gravar los beneficios bancarios o los descuentos en el transporte público son ejemplo de cómo con la misma sirve al bien común, aunque a la luz de cuantos sondeos se develan, el sentimiento de hartazgo hacia ella y sus actores crezca.
Parte de este desafecto se debe al empeño con que las derechas -política, mediática y económica- alientan el relato de que en el 'desalmado' Pedro Sánchez se reencarnan nuestras peores pesadillas y cuantos males pueda representar la 'politización' de todo. Echarlo de La Moncloa es, para algunos, un reto épico. Por ello, quienes de verdad mueven los hilos de este cotarro no regatean esfuerzos apelando a sentimientos como el doloroso recuerdo del terrorismo etarra, la amenaza independentista y la quiebra de la unidad nacional, el disenso constitucional, el 'revanchismo' guerracivilista, por no olvidar ataques varios a la caza, los toros u otras expresiones de rancia esencia cañí. «Hay que llegar el corazón de los votantes sin pasar por su cerebro», parecen pensar.
Termino de escribir la columna y empiezan los telediarios nocturnos. En el de mayor audiencia escucho, ya, la belicosa cantinela diaria de su director: «el sector Podemos del Gobierno dice…; sin embargo, el sector PSOE del Gobierno sostiene…». Y así, mientras el apocalipsis trompeteado no llega, algunos van minando el crédito de la política, como si ésta solo fuese responsable de nuestros males y que cuantas cosas buenas se resuelven con ella, cual maná divino, nos cayesen del cielo.