Alejandro Bermúdez

Con los pies en el suelo

Alejandro Bermúdez


Una merienda de negros… o de blancos

20/01/2023

¿De dónde ha salido este 'espécimen' humano actual? Les cuento un secreto: yo ya no creo en los ángeles exterminadores. No creo porque, si de verdad existieran, sus espadas incandescentes  necesitarían de toda la energía disponible en tierra, ¡con el precio que tiene!, para  mantenerse a la temperatura necesaria. Fíjense la de grupos e individuos a los que tendría que aplicar su filo incandescente:
A la mitad, por lo menos, de quienes han ostentado algún cargo público con llave de caudales. Me da igual el yerro de la ganadería a que pertenezcan, casi todos los que han podido han trincado hasta ahora. Ahí tenemos a nuestro ex ministro Álvarez Cascos y a nuestro presidente cambiando la ley para librar a sus sostenedores por haber metido la mano en la caja. No hablemos ya de las antiguas Filesa, Malesa, el Bigotes y los cien mil hijos de su madre…un montón de 'gigavatios' harían falta para mantener la espada en funcionamiento.
Menos mal que se librarían los jueces, estas almas cándidas con sus togas  negras y sus barbas blanca… ¿Los jueces? ¡Iluso de ti! ¿No te das cuenta las artimañas de que son capaces? Al mismo que es autor de una Norma le nombran después para que vea si está bien hecha. Conclusión: está perfecta. Y  como no quieren ser encasillados en una tendencia política ya se reúne cada banda por separado para que se vea bien el yerro a que pertenecen. Aunque no son muchos en número también necesitarían la visita del ángel.    
Al menos, digo yo, se librarían estas progresistas. Esas que se erigen en adalides de las mujeres maltratadas y transexuales incomprendidos. ¡Pero cómo! si lo único que hacen es gastar fondos en asociaciones con bonitos nombres y  horrible resultado. Porque lo real es que cuando intervienen los delincuentes se van antes a la calle, el número de víctimas de los malos tratos, después de tanto dispendio, se mantiene inalterable y en lugar de ayudar a quienes tienen la desgracia de que sus sentimientos no coincidan con su físico lo que hacen es fomentar de forma artificial que crezca el número de quiénes sufren esta situación. Porque, vamos a ver, nacer con una forma física y desear tener otra no es ninguna bendición del cielo. Cuando menos genera  sufrimiento a quién le ocurre. Pues si por esta progresía andante fuera, cada ser humano sería una letra más de ese conjunto que forman los que no están de acuerdo con su forma física. Obviamente ese fomento de la disfuncionalidad choca frontalmente  con la Naturaleza, porque atentar contra la Naturaleza es tratar de convertir la excepción en regla… y para los asustadizos: lo que digo nada tiene que ver con el respeto que se debe a cualquier ser humano. Lo cierto es que la filosofía progre sentiría en su cuello el calor de espada llevándose por delante la producción de varias centrales nucleares.
¿Qué hacemos con quienes formamos parte de ese rebaño que consiente todo esto? No merecen conservarse quiénes lo aceptan a cambio de  'bollicaos' y programas de televisión horteras, inmorales y zafios. Obviamente, de existir, ya habríamos visto al ángel actuando.
Sin embargo, pese a todo esto, creo en el ser humano y creo que con el esfuerzo de muchos levantará la cabeza y no necesitará ningún ángel exterminador.       

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