Juan Ignacio de Mesa

Barrio de Santo Tomé

Juan Ignacio de Mesa


Mariano

20/06/2022

La madrugada del pasado sábado nos traía una triste noticia, Mariano Diez Moreno fallecía. Estaba sufriendo las consecuencias de una enfermedad. Tenía limitada su movilidad y no quería que le viéramos así, pero su cabeza seguía tan lúcida como siempre. El ánimo y el cariño de Merche, Mercedes (Cuqui), Isabel, Mariano y Blanca le mantenían. Debía ser doloroso para todos verle así.
Mariano era un hombre íntegro. Al igual que todos sus hermanos, dignos hijos de aquel don Mariano que fue ejemplo de profesionalidad y buen hacer. Toda la familia Díez eran ejemplares. Aunque suene a antiguo, unos caballeros en el más amplio sentido de la palabra. Lealtad, sentido de la responsabilidad, cumplimiento de la palabra dada. Así era Mariano.
En sus manifestaciones de amistad, demostraba su compañerismo y era capaz de ponerse el primero cuando había que hacer cualquier cosa. Experimentó en carne propia las miserias de las confrontaciones partidistas. Él, que fue fundador de Alianza Popular (antecedente del Partido Popular) en Toledo, vivió todo lo bueno y todo lo malo que la militancia política suponía. Concejal en el Ayuntamiento de Toledo, fue presidente de la Diputación Provincial. Su bonhomía supuso que cualquier colaborador suyo de aquellos años, guarde un buen recuerdo de él. Nunca podré agradecerle lo suficiente el que aceptara ser jefe de Gabinete en el periodo que fui presidente de CCM. Sabía, conocía y aconsejaba como nadie. Siento no haberle hecho caso cuando me advirtió de donde iban a venir las traiciones, ahí pequé de ingenuo al pensar que la gente cumplía con la palabra dada.
La lealtad de Mariano a la entidad y al cargo, le supuso tener que soportar el ostracismo al que otros le sometieron. Pasado el tiempo todos tenemos la evidencia de que personas como Mariano son, no solo necesarias, si no imprescindibles para tener la tranquilidad de que las cosas se hacen bien. Él aceptó la situación sin resquemor, demostrando que estaba muy por encima de los que pensaban que podían hacerle daño. Merche, tú, tus hijos y tus nietos podéis estar orgullosos de él. Su recuerdo quedará entre nosotros como lo que fue. Gran hombre, gran esposo, gran padre, gran abuelo y gran amigo.