Javier Ruiz

LA FORTUNA CON SESO

Javier Ruiz


La marca blanca del presidente

02/02/2023

Pedro Sánchez ha dicho en el Senado que las grandes empresas no suben los sueldos a sus trabajadores, pero sí los dividendos a los directivos. Como en casi todo lo que dice el presidente, solo hay algo de verdad al final de la frase, cuando asegura que se suben los bonus quienes mandan. Obviamente, si cumplen objetivos. Es legítima la afirmación de Sánchez, pues hace ya tiempo que voces autorizadas como la de Fernández de Cos, el gobernador del Banco de España, advierten del pacto de rentas necesario para hacer frente a los efectos devastadores de la inflación. Eso quiere decir que, para que no caiga la subida de precios sobre las espaldas de los que menos tienen, habría que transferir recursos de otros estamentos más elevados hacia las clases más bajas. Todo eso está muy bien y al presidente le gusta recordarlo. Pero debería empezar predicando con el ejemplo y renunciando al bonus track pantagruélico que Hacienda se lleva con la inflación. Pero, ¡ay amigo!… No hagas lo que yo haga, sino lo que yo digo.
Sánchez hace una cosa y la contraria y ya nos tiene acostumbrados. Es la marca blanca de sí mismo cuando ya no cuenta con más escapatoria que un callejón sin salida. Son en esos casos en los que saca el conejo de la chistera y hace plof como Houdini. Aparecen los malos y odiosos empresarios con puros, esos mismos a los que luego convoca a sus desayunos con diamantes, y hace de ellos un trapo o guiñapo con los que echarlos a los leones. Refiere el caso de la empresa que gana seiscientos millones de euros y todo el mundo piensa en Mercadona y Juan Roig, de quienes Aquelarres Belarra hace puré y escabechina. Curiosamente, han ido a dar con una de las empresas que mejor paga a sus trabajadores y a los que ha subido el sueldo lo que marca la inflación. Ya es osada la incompetencia. Pero estoy seguro que si Belarra y Sánchez gestionasen un día Mercadona, la hundirían sin remisión en el suelo de su ignorancia.
Juan Roig es un señor que ha creado riqueza en su tierra y no contento con ello, se ha expandido por toda España elaborando una de las cadenas de alimentación más prestigiosas del mercado. Si uno está atento a la vida y no solo a la nómina, vería cómo muchos empleados de Mercadona han podido conciliar sus vidas laborales y familiares cuando han sido padres. Recuerdo perfectamente contar el número de embarazadas en los Mercadona, porque imaginaba que si todas las empresas fueran como esta, la natalidad en España se dispararía. Pero, claro, Belarra prefiere mascotas y Sánchez, la marca blanca de su discurso de papel. Bienestar animal y diarrea mental.
La deriva populista del presidente no augura nada bueno y hace pensar que ha fijado su vista en la reelección, basándose en presupuestos bolivarianos y poco amigos del libre mercado. Hay un dato que resulta estremecedor para quienes llevamos toda la vida en la calle… Hoy el anunciante privado ha desaparecido, ha muerto… El autónomo se muere cada vez que le cobran el cuponcito del mes y no es el de Carmen Sevilla. En cambio, las instituciones se hacen cada vez más gordas y pudientes, contratan más funcionarios, recaudan más, tienen más para sus necesidades y si no, se las inventan y expolian. El problema de ese modelo es que se irán los pocos que crean riqueza; se acostarán un día y decidirán no levantarse más. Que tire de la persiana otro y pague las nóminas Sánchez. Pedro se ha convertido en marca tan blanca y gastada, que ya no pasa siquiera un control por el código de barras.