Estoy aburrido de leer  que la información es poder, supongo que se trata de disquisiciones filosóficas que se escapan a mis entendederas; lo que afirmo,  si la propuesta es cierta, es que la alcaldesa de Talavera  y sus acompañantes  han decido que los talaveranos  estemos limpios de toda responsabilidad que pudiera caernos por saber algo, tener algún conocimiento: ni las obras del Prado -según algunos la aniquilación- ni  qué pasa en definitiva con las supuestas llegadas de empresas de importancia a la ciudad, ni nada como escribí antes. Ignoro si en alguno de estos planes etéreos  exigen secreto por alguna de las partes, tanta es mi ignorancia, lo que no desconozco es que no sé -ni sabemos- algo de acontecimientos que tanto nos importan; por  poco diligentes y curiosos, poco participativos y menos interesados que solamos ser en Talavera por nuestras cosas, en el presente caso no es culpa nuestra es de quien no nos ha contado ni una palabra.
A estas alturas,  ¿podría explicar algún alma caritativa qué pasa con la cerámica de la Ermita?   Servidor pasa por allí casi todos los días y nunca, excepto la lejanísima primera semana antes del «tapado» ha visto a nadie restaurando nada. Nadie. Qué método usan  para las famosas «restauraciones»? Lo único que veo un día detrás de otro son las fotografías y el bastidor  de madera que se van deteriorando y pudriendo de asco. Como desde esta humilde columna no puedo hacer otra cosa que señalar el desasosegante misterio, pido a las asociaciones y a los talaveranos que se interesen de una vez por este patrimonio que ahora mismo parece tan perdido como «el barco del arroz», en expresión tan talaverana, como la misma cerámica. SOS Talavera, Talavera resiste, o alguien amante de ella hasta lo más hondo como Miguel Méndez deberían enterarse de una vez qué historia es esta que al pasar el tiempo nos llena de incertidumbre. Dirá la alcaldesa que se trata de trabajos para proteger la cerámica y tal  pero nadie puede negarme, ella tampoco, que es ya mucho tiempo de «restauraciones» sin saber una palabra  de cómo va la cosa. Ahí está el relativo silencio que  han  llevado sobre la restauración de los Jardines  y que tiene una legión de detractores en una acción  que  ya no tiene vuelta  atrás, por cierto.
Aunque no tenga que ver nada más que con el misterio en el que está envuelto todo este laberinto, me viene al pelo para recordar que el próximo 2 de diciembre, el susodicho Méndez va a dar una conferencia a las 19,30 en el Rafael Morales sobre los misterios y las cosas enigmáticas de Talavera que seguro que será más que divertida  interesante hasta el límite. 
No, no creo que el día dos Miguel nos cuente lo de la cerámica de la Ermita, eso queda para una fecha posterior, cuando alguien  haya hablado.