Pilar Cernuda

CRÓNICA PERSONAL

Pilar Cernuda

Periodista y escritora. Analista política


La supercumbre

27/06/2022

España entera será centro de la OTAN en los próximos días. No es la primera cumbre atlántica que se celebra en Madrid, pero Pedro Sánchez la ha preparado como si en ello le fuera la vida -a lo mejor efectivamente le va en ello su futuro político- y Madrid va a quedar prácticamente tomado durante esta semana. Más que cuando se celebró la reunión más complicada que ha tenido lugar en España, la cumbre sobre Oriente Medio. Además de la inauguración de la Expo de Sevilla y los Juegos de Barcelona 92, con docenas de Jefes de Estado y gobierno que obligaban a extremas medidas de seguridad.

Todo un reto para un Sánchez que necesita como el comer que su imagen internacional salga fortalecida, pues ese perfil es hoy el único que pueden vender sus colaboradores para afianzar su permanencia en Moncloa, ya que su situación interna es difícil, por no decir crítica.

Hay un hecho contrastado: el interés de los protagonistas de esta cumbre atlántica por entrevistarse a solas con el Rey, más allá de los encuentros institucionales programados. Será D. Felipe quien acuda a recibir a Joe Biden a pie de avión, y en la embajada de Estados Unidos ponen el acento en la reunión que mantendrá el presidente americano con el Rey. Aunque también habrá encuentro a solas con Pedro Sánchez. Al fin. No podía ser menos, es jefe de gobierno del país anfitrión.

La cumbre no está exenta de riesgos. El que más preocupa a los asistentes es el análisis de la guerra de Ucrania, las perspectivas de esa contienda que se prolonga más de lo previsto, si existen posibilidades de negociación con Putin y también, cómo superar el veto de Turquía a la incorporación de Suecia y Finlancia.

De cara a España la cumbre se celebra en un momento inquietante para Pedro Sánchez, y los dirigentes de la OTAN podrán advertir personalmente el clima que se vive en la calle, con manifestaciones antiotan apoyadas por partidos socios del gobierno o que forman parte del gobierno, pues Podemos se está moviendo en la trastienda. Todo ello acrecentará el recelo que provoca que Sánchez presida el único gobierno europeo con un partido comunista. Escucharán los dirigentes de la OTAN hablar de Andalucía y sus elecciones, con muy mal resultado para Pedro Sánchez, y advertirán los presidentes atlánticos el escepticismo con el que se han recibido las medidas supuestamente milagrosas con las que Sánchez pretende luchar contra la crisis galopante y la ya segura recesión.

La cumbre de la OTAN la planteó Sánchez como una oportunidad única para relanzar su figura y, quien sabe, quizá para acceder a un puesto relevante en el escenario internacional que le permita dejar Moncloa antes de unas elecciones que se presentan muy difíciles de ganar.

Veremos cómo transcurre, pero se había puesto el listón tan alto en esa reunión que, como ocurre tantas veces, salir del paso puede considerarse en fracaso.