Jesús Morales

Nada particular

Jesús Morales


Intolerable desfachatez, falta de respeto y…II

07/06/2022

No creí nunca escribir una columna como la que me dispongo a presentarles ahora, pero hay momentos en los que no se elige el asunto, la actualidad impone el tema, no se elige, no hay opción por una cosa u otra, no hay libertad. Digo todo esto porque lo que están leyendo no es la columna que estaba destinada para este martes esa queda esperando en el ordenador para mejor ocasión, desgraciadamente ha sido la actualidad la que me ha obligado a cambiar de planes y variar de asunto.
A estas alturas les creo enterados del surrealista suceso ocurrido el otro día en la ermita del Prado,  la calificación de surrealista es porque no puedo referirme al suceso de manera más suave, parece que David Moreno portavoz municipal de VOX, ha presentado tres denuncias por el asqueroso hecho. Como es natural, lo que hay que hacer es identificar a los autores aunque creo tener una pista para la búsqueda. Me juego algo a que los tipos no son de Talavera. Al menos eso quiero creer, me es muy duro pensar que un talaverano haya sido capaz de una barbarie como la perpetrada el otro día en la ermita donde se oficiaba además una misa de funeral. Hay que tener en cuenta que en los últimos días ocurren en Talavera algunas cosas de corte raro, muy raro, como cuando hace poco llegó aquel hombre en bicicleta al Cristo de la Corredera y la emprendió a golpes y escupitajos con la cristalera de la pequeña capilla o lo que contaba del patinete en plena misa de  funeral, no sé si serán sólo coincidencias pero me disgustan tales coincidencias.
Tampoco sé, como escribí antes, si los autores son de Talavera o viven aquí o si se trata de gente de fuera, en todo caso me da completamente igual, sea como sea es gente que no tiene lo mínimo que debe tener para convivir con los demás en una sociedad normal y sencillamente no son respetuosos con las mínimas reglas de convivencia. No  pienso convivir con individuos con tan bajo concepto de lo que es la coexistencia y no me da la gana compartir con ellos ni un minuto de mi tiempo, vamos, no lo puedo escribir más claro. Si son talaveranos aquí está mi voto para que cuando los identifiquen se les castigue con una multa que no olviden en su vida y si no lo son, las autoridades ya tardan en ponerles en dirección a su tierra y es que no se puede venir ignorando un par de palabras tan necesarias para la coexistencia: respeto y convivencia. La ermita del Prado tiene para Talavera un fortísimo significado que va más allá de lo religioso y no es tolerable  que venga alguien de dentro o de fuera a tocárnoslo no, reitero que no estoy dispuesto a compartir esta ciudad ni un minuto con ellos, autores de tal ejemplo de , salvajismo, falta de respeto, barbarie,  incultura y demás.
Tampoco entiendo a los toledanos que celebraron con música los cincuenta años de la prohibición de bañarse en el Tajo.