Ángel Monterrubio

Tente Nublao

Ángel Monterrubio


Joaquín Pi y Arsuaga

20/10/2021

La epidemia de cólera morbo del año 1885 aparece en marzo en el puerto de Valencia, desde allí se extenderá como reguero de pólvora a toda la Península, el brote contagiará a más de 300.000 personas y de ellas casi la mitad morirán. A principios del mes de julio se detectarán los primeros casos en Talavera. El Ayuntamiento de la ciudad, dirigido por Justiniano Luengo, a propuesta de la Junta de Sanidad, despliega de inmediato toda una serie de medidas preservativas: refuerza la inspección médica, hace seguimiento de los casos sospechosos, realiza fumigaciones diarias de las calles, suspende todos los actos públicos y organiza un control exhaustivo de los viajeros que llegan a la ciudad. Ese dispositivo, sin duda, hace que la epidemia no tenga las consecuencias trágicas que tuvo en otras localidades. A mediados de septiembre la epidemia empieza a remitir, en vísperas de las Ferias de san Mateo ya han transcurrido diez días sin contagios ni muertes por la enfermedad colérica, también hay una mejoría notable en la mayor parte de los pueblos de la provincia, pero las Ferias de Ganado no se celebran el 21, 22 y 23, como es costumbre y se aplazan para el mes de octubre.
Especial protagonismo en la campaña sanitaria contra el cólera en Talavera tendrá un joven médico, Joaquín Pi y Arsuaga, hijo del presidente de la Primera República Española, Francisco Pi y Margall. Durante cuatro meses prestará sus servicios en Talavera para el control de la epidemia en la que destacará por su incasable trabajo en interminables jornadas y sus novedosos métodos. El vecindario agradecerá sus desvelos promoviendo un acuerdo en sesión pública del ayuntamiento para darle las gracias en nombre de todos los talaveranos «por la celeridad, solicitud e inteligencia con que durante cuatro meses ha prestado al segundo sus servicios de médico, luchando con la epidemia y corriendo y afrontando con tanto valor como caridad, verdaderos peligros».  Joaquín Pi y Arsuaga siempre recordó con cariño su etapa talaverana y la gratitud de su gente. No participará en política de manera tan activa como su padre o su hermano, se centró más en el periodismo y la medicina, fue director del periódico El Nuevo Régimen, fundado por su padre y en el ámbito médico será socio fundador de la Sociedad Española de Higiene y un reputado internista.