Delegados de toda la provincia han participado en el Palacio de Congresos de Toledo en la Asamblea General de CCOO, que forma parte de los actos previos al Congreso Confederal. Durante el acto, en la mañana del martes, se han repasado los distintos acuerdos que el sindicato ha alcanzado a nivel nacional durante el último periodo, como el acuerdo de pensiones, la subida del salario mínimo interprofesional y el de los ERTE. Además, esta Asamblea ha querido ser una primera toma de contacto para instar al Gobierno para que convoque las mesas de diálogo para revertir la reforma laboral.
Una derogación de la reforma laboral, apuntó Federico Pérez, secretario provincial de CCOO, que no es solo un mantra de la izquierda. Porque muchos trabajadores desconoce cómo les afecta directamente esta reforma, «cómo pueden pasar de un día para otro de cobrar el salario que vienen percibiendo por su salario colectivo, a cobrar el salario mínimo, o cómo a través de distintas herramientas de la reforma, pueden cambiar las condiciones del trabajador, si la patronal se niega a renovar el convenio». Existen empresas en la provincia, apuntó, como Ibercacao, en Quintanar, «que buscan una representación afín y firman convenios por debajo de las condiciones que marca el sector nacional». De ahí, apuntó, la importancia de derogar esta reforma «cuanto antes».
Este es un primer paso, un primer llamamiento, para que antes de finalizar el año, se convoquen las mesas de negociación. De no ser así, explicó Pérez, si el Gobierno no se ajusta a estas demandas, comenzará un calendario de movilizaciones.
En cuanto a los ERTE, apuntó Pérez, «se han demostrado como una herramienta fundamental para proteger los puestos de trabajo en la provincia de Toledo». No se trata tan solo de sectores como la hostelería y comercio. Uno de los más afectados en la provincia, donde más puestos se han protegido, ha sido curiosamente la aeronáutica y aeroespacial. La mayoría de las empresas están todavía en ERTE. En la provincia quedan ya solo 2.500 trabajadores en ERTE, de los 35.000 que hubo, «son puestos de trabajo que se han salvado, gracias a la apuesta que ha hecho el Estado en colaboración con los agentes sociales».
Nuevo modelo productivo. El secretario regional de CCOO, Paco de la Rosa, recordó que el Congreso Confederal será el momento más importante para el sindicato, donde se decidirán las políticas del sindicato de los próximos cuatro años. Llega en «seguramente, una de las encrucijadas más importantes que ha vivido la sociedad española en las últimas décadas», como se ha valorado en el congreso del PSOEy ahora también lo valora CCOO, «porque seguramente, la sociedad en la que vivimos dentro de dos años será diferente, nos enfrenamos a unos cambios muy imperantes, algunos movidos por la necesidad, como el cambio de modelo energético». Pero también, apuntó De la Rosa, habrá que cambiar el modelo productivo de cara a una sociedad sostenible.
Ahí el secretario regional de CCOOhabló de cambiar las formas de trabajo, y derogar la reforma laboral, «porque es imprescindible acomodar las nuevas realidades de empleo que se vayan a producir los próximos años a un legítimo equilibrio entre las empresas y los trabajadores, y con la legislación actual es muy difícil que el futuro de los trabajadores sea luminoso». Su intención es evitar que siga habiendo personas pobres a pesar de estar trabajando, algo imposible en el futuro con la reforma laboral «y CCOOno está por la labor de que nos enfrentemos a un horizonte donde nuestros hijos y nuestros nietos vivan mucho peor». La idea es cambiar la legislación y que no haya políticas de beneficencia, sino políticas de equilibrio, con puestos estables y salarios mínimos.
Finalmente, durante la Asamblea, Enrique Martín-Serrano, adjunto a la Secretaría de Protección Social y Políticas Públicas de CCOO, informó el reciente acuerdo sobre pensiones con el Gobierno. La buena noticia, explicó, es que el acuerdo garantiza la vuelta a la revalorización de las pensiones en base al IPC, e incluye la derogación expresa del factor de sostenibilidad «injusto, que venía a condenar a las generaciones más jóvenes a tener pensiones más bajas». El proyecto de ley ya está en tramitación. Eso sí, Martín-Serrano llamó la atención sobre el hecho de que los presupuestos solo se aplicarán un año, y en la medida en que la reforma no termine la tramitación parlamentaria, no se extenderá. De ahí que pide a los grupos parlamentarios que mantengan su palabra y apoyen la reforma.