Carolina Sánchez

Macguffin

Carolina Sánchez


La CCM la montó primero

21/03/2023

Domingo por la tarde. Me salta la noticia de que el banco suizo UBS se va a quedar con el Credit Suisse a cambio de 2.000 millones de dólares, muy por debajo del precio real, aseguran. La información dice que así se evita un nuevo desplome en Bolsa del Credit y, con él, de todo el sistema bancario. El texto habla de éxito y de buenas noticias, pero yo hace tiempo que dejé de confiar en las informaciones llamando a la calma. Cosas mías.
Además, hay algo en todo esto que nos suena a muchos. Precisamente en unos días, el 29 de marzo, se cumplirán 14 años de la entrada del Banco de España en la Caja Castilla-La Mancha (CCM). Después pasaron tantas cosas –entre ellas la destrucción del sistema de cajas de ahorro y el rescate camuflado de la economía española- que pocos se acuerdan ya de todo aquello, pero siempre he pensado que en ese momento Castilla-La Mancha perdió su inocencia. Esa idea de progreso con la que habíamos crecido como región se esfumó de golpe, justo cuando el vicepresidente Solbes anunciaba la decisión de intervenir a la CCM. ¿El motivo? las «dificultades de liquidez» que atravesaba la entidad, no dijo más.
Después supimos que lo que había pasado es que la caja se había puesto a invertir en ladrillo como si no hubiera mañana y a dar créditos con la misma alegría. A lo que se unió la catastrófica aventura del Aeropuerto de Ciudad Real. El caso llegó a la Audiencia Nacional y tanto el presidente como el director general de la entidad, Juan Pedro Hernández Moltó e Ildefonso Ortega, fueron condenados a dos años de prisión por manipular las cuentas, sumando «beneficios inexistentes» para tapar «el desastroso estado financiero de la entidad». O lo que es lo mismo, en la CCM 2+2 era igual a 6, o más según el día.
Un juicio que pasará a la historia regional por frases como la de «yo era como la reina madre de la CCM» y mis funciones eran la de ser su «animador socio-cultural». Burdos intentos de Hernández Moltó para justificar, según él, su nulo poder ejecutivo en la entidad y, por tanto, su falta de responsabilidad en todo aquel guirigay. No cuajó porque, entre otras cosas, Moltó pintaba, y mucho, en la CCM.
Ser la primera entidad intervenida en España se pagó caro. La CCM fue absorbida por Caja Astur y convertida en banco, después pasó a ser Liberbank... y ya me pierdo en los nombres en los que se ha diluido, y perdido, la extinta caja regional.
Por no hablar del coste político. El entonces presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, perdió las elecciones el día de la intervención de CCM. Lo de Cospedal fue, en cierta medida, una victoria en diferido.
Con la distancia que da el tiempo, lo de la CCM fue peccata minuta si lo comparamos con lo que pasó después. Aquí ni hubo tarjetas black, ni sueldos millonarios, ni agujeros en las cuentas... hasta el rescate de 9.000 millones, después del dineral que aún le debemos a Europa por la que liaron Caja Madrid o Caixa Nova, suena a calderilla.
Y me salta otra noticia: fallece el exvicepresidente Pedro Solbes. Descanse en paz. ¿Muchas casualidades para un solo día? Se verá.