Liberados. Es el sentir de todos y cada uno de los integrantes del AD Bargas Qualery FS, y, especialmente, de su plantilla. Así lo traslada el portero Fidel Barrientos, uno de los protagonistas de la temporada. «Ha sido un año muy difícil, de mucha presión y durísimo», reconoce el talaverano, para quien esta nueva permanencia en Segunda B «tiene igual o más mérito que la clasificación para la Copa del Rey de la pasada campaña».
La primera vuelta tan deficitaria, con solo 15 puntos, obligó al cuadro toledano a una machada que se ha materializado en los últimos ocho partidos del campeonato, con cinco victorias y tres empates. «Hemos hecho 25 puntos en la segunda vuelta, números de 'playoff', cuando lo teníamos muy complicado», admite. Y es que, reconoce que se vieron en el pozo porque tenían perdidos «todos los enfrentamientos directos con los rivales que estaban luchando por el mismo objetivo».
Al final, quiere resaltar esta cosecha, y también que han sido «el único equipo en ganar al AlbaceteFS después de fichar a Chino». Aquel partido es, para el guardameta, «el punto de inflexión, el que nos permitió seguir creyendo». Se ha visto desde entonces a un Bargas FS «que ha dado lo que se esperaba, y que, por circunstancias, no pudo dar antes», añade el jugador rojillo.
Se está refiriendo, obviamente, a la retahíla de lesiones que han asolado al plantel. Para Fidel, el secreto para sobreponerse a las dificultades reside en «el grupo fantástico que hemos hecho, todos a una, sin ninguna mala cara ni reproches». Y también, por su puesto, a que «nadie se ha rendido», una situación que ha llevado, como matiza el portero, a algunos jugadores «a jugar lesionados».
Fidel quiere subrayar en especial la actitud de su compañero bajo palos Alberto, que, sin gozar de apenas minutos, «siempre ha estado ayudando, no ha faltado a ningún entrenamiento y es uno de los más queridos del equipo».
Y, por supuesto, tampoco se deja fuera a la afición, que «ha abarrotado el pabellón cuando las cosas no iban bien, y no solo para la Copa». Por eso, Fidel considera fundamental de cara al futuro que el club «pueda mantener el bloque que ha creado; sería una pena que se rompa». Pero eso será dentro de unas semanas. Ahora toca descansar y disfrutar de los malos y los buenos momentos.