Si en vez de una golondrina hubiera sido una paloma a buen seguro los fieles del Santo Ángel Custodio hubieran pensado que el Espíritu Santo inmortalizado en el impresionante cuadro de Vicente Carducho que preside la ermita se había hecho carne en fecha tan señalada. Sea como fuere, lo cierto es que este ejemplar despistado se convirtió, sin quererlo, en el protagonista de la jornada matutina de la romería del Santo Ángel Custodio.

En su homilía, el celebrante habló a quienes asistieron a la eucaristía del amor fraterno, entendido como «amor entre iguales». Confraternización, de hecho, hubo entre la alcaldesa y los concejales de su equipo de Gobierno con los ediles de la oposición. De hecho, tras acabar la misa no tardaron mucho en refugiarse todos en el vino español preparado por los anfitriones. Ya sabe que la política tiene algo de endogámico y aunque este jueves todos se pondrá en el Pleno de vuelta y media, en el cigarral todo fue aplicación de la teoría del amor fraterno. El 'buenrollismo' se prolongaba desde la tarde del sábado, seguramente un milagro de la Blanca Paloma. Por el cigarral del Ángel Custodio se pudo ver a la plana mayor del equipo de Gobierno: Milagros Tolón, José Pablo Sabrido y Noelia de la Cruz. Los 'populares' estuvieron encabezados por su jefe provincial Carlos Velázquez, cada vez más activo en la vida toledana y empapándose de toledanismo, Juan José Alcalde, José López Gamarra y Miguel Ángel de la Rosa. La nómina del Ciudadanos estuvo cubierta por Esteban Paños y Julio Comendador y por Vox, acudió María Ángeles Ramos. Por el lado regional, pudo verse al presidente del grupo socialista en las Cortes, Fernando Mora, acompañado de su mujer.

El resto de los mortales, es decir, los ciudadanos de a pie pasaron una jornada agradable dando paseos por el vergel toledano que esconde el cigarral. Unos jardines y unos árboles que, al parecer, se libraron tanto de Filomena y de la DANAdel año pasado y si no se libraron, habría que contratar al responsable de su mantenimiento para que haga lo propio con los dependientes del Ayuntamiento. El vino, las roscas, la limonada y los tostones no faltaron por el recinto ni tampoco las 'delicatessen' que elabora el cigarral, que podían degustarse en la terraza junto al Tajo, que dejaba ver su herida a través de las ya persistentes espumas amarillas.

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