Muy despierta, Carla Quilez asombra por la madurez en sus respuestas, a pesar de que tan solo tiene 14 años. Su nombre se ha hecho conocido porque fue la gran sorpresa del pasado Festival de San Sebastián, donde ganó el premio a la mejor interpretación femenina gracias a su personaje en La maternal, de Pilar Palomero, que aborda el tema de los embarazos juveniles.
¿Qué fue lo que más te costó de introducirte en un personaje como el de La maternal que, intuyo, está en las antípodas de tu vida personal?
No me costó nada en concreto porque tenía muchísimo acompañamiento de todo el equipo, empezando por la directora Pilar Palomero, que nos daban todo muy masticado, pero lo que me ha costado es conocer las historias y meterme en el papel de una madre adolescente sabiendo todo lo que han pasado y tenerlas delante de mío. Porque ellas venían al rodaje y eran chicas que te alegraban la vida, son maravillosas.
Está bien que hagas esa precisión de que en el reparto de La maternal salen madres adolescentes reales.
Para mí, el momento de la película fue cuando contaron sus testimonios auténticos. En ese instante fue cuando yo, no solo la Carla de la película y parte del equipo, decidimos parar media hora el rodaje porque nos emocionaron a todos.
No tenías experiencia cinematográfica como actriz. ¿Cómo te conoció y seleccionó Pilar Palomero?
Fue por Instagram porque yo me abrí una cuenta para subir bailes y se empezaron a viralizar, y como el casting de La Maternal fue en tiempos de pandemia, Pilar se orientó para buscar a niñas a través de redes sociales y así me localizaron. Al principio, mi madre y yo no nos lo creíamos, pero luego nos conocimos e hice varias pruebas con otros actores que iban a participar.
Primer largometraje y ganas la Concha de Plata a la mejor interpretación femenina en el Festival de San Sebastián. ¿Cómo viviste ese momento y cómo lo has asimilado?
Es un premio muy grande y jamás pensé que me lo llevaría. Yo fui a San Sebastián para apoyar la película. Pero cuando lo gané sentí una emoción terrible y tuve claro que a partir de aquí quiero seguir para adelante.
Eres muy joven. ¿Quieres continuar como actriz o prefieres, como hasta ahora, centrarte en el baile?
Sí que me gustaría seguir como actriz, pero sin dejar el baile que, precisamente, es lo que me ha abierto las puertas al cine.
¿Qué tipo de baile te gusta?
He pasado por clásico, contemporáneo y claqué, pero ahora estoy más por el hip-hop, por la danza urbana.
Me has hablado de que te emocionó mucho escuchar con sus propias palabras a esas madres adolescentes. ¿Han salido adelante?
Alguna tenía miedo de salir y que las juzgaran, porque en la película les habían escuchado sus historias reales. Pero cuando estaban en el escenario y recibieron el aplauso de todo el mundo, se sintieron libres.