El Soliss Águilas sabía la dificultad que entrañaba recibir al Complutense Cisneros, por la importancia de los puntos, pero sacó el partido adelante por 31-22 en un buen día. Ya desde los vestuarios se respiraba un ambiente de máxima concentración.

El cuadro toledano respondió en consecuencia con un comienzo muy serio. Había en su juego mucha organización, fluidez y comunicación, de forma que la mayor parte del primer periodo se desarrolló en campo rival. El equipo madrileño abrió el marcador gracias a un tiro a palos, debido a un golpe de castigo, pero luego optó por un juego de patada al que las toledanas supieron responder perfectamente. El parcial fue de 12.-3 favorable a las Águilas.

En el segundo tiempo, las locales mantuvieron la constancia en su juego, mientras el Cisneros intentó jugadas de ataque. Se encontraron, eso sí, con una defensa toledana bastante férrea. Pero la desorganización comenzó a aflorar en las filas toledanas debido al calor y la dureza el partido. Rápidamente, se repusieron para meterse en el encuentro.

La superioridad en las melés era patente, por lo que el Cisneros terminó con catorce jugadoras sobre el campo, por culpa de las lesiones. Aun así, las Águilas tuvieron que hacer un esfuerzo para mantener la concentración y evitar que las madrileñas se adelantarsen en el marcador. El parcial fue muy ajustado (19-19). Con este triunfo, las Águilas de Toledo se alejan de los puestos de descenso, para asegurarse su presencia en Primera Regional.