PIrene Sánchez-Escribano intentar recuperarse estos días de su esfuerzo del pasado sábado en el Campeonato del Mundo de Campo a Través, y de un viaje de regreso de más de 24 horas que le han permitido a la toledana reposar bien los resultados de esta primera fase del curso. Por eso, no puede esconder su satisfacción por la que ha sido su temporada de cross «más completa», con dos campeonatos internacionales y los objetivos casi cumplidos.
Le queda la espina de no haber abordado su ilusión de repetir o mejorar el vigésimo quinto puesto de hace cuatro años en Dinamarca, pero, en perspectiva, la atleta del Adidas, confiesa que «es un buen puesto, teniendo en cuenta el viaje, las condiciones y el circuito». Es cierto que, tras una salida rápida, cuenta que el calor la acabó afectando y provocó que fuera perdiendo unas posiciones muy valiosas.
Pero se queda con que la lejanía de Australia le ha permitido «disfrutar más de los compañeros del equipo nacional» y con que lo dio todo el día de la carrera. Y es que, valora mucho que es «una cita en la que corres con las mejores del mundo, y eso te permite siempre mejorar tu nivel; fue un campeonato bonito».
En cualquier caso, antes de situar su mente y sus piernas en la pista, Irene Sánchez-Escribano va a cerrar el ciclo de campo a través este domingo en el Cross Internacional Castellano-Manchego de Quintanar de la Orden. Es una prueba que llega a destiempo en el calendario, pero en la que la capitalina intentará ofrecer lo que le quede en el cuerpo. Se enfrentará a otras mundialistas, como Laura Luengo y Rosalía Tárraga. En la prueba masculina también estará el oropesano Sergio Paniagua.
Por lo demás, los próximos meses los encarará sin un objetivo fijado hasta que llegue ya el verano y las citas importantes en los 3.000 obstáculos. El año pasado decidió con su entrenador que lo mejor era ponerse a punto para un 10.000 en pista, pero ahora mismo, la toledana viene de una continuidad que no requiere puesta a punto. «Ha sido un invierno muy bueno y tengo bastante base, así que es tiempo de coger volumen», explica.
Evidentemente, una de las primeras metas de Sánchez-Escribano será recuperar el cetro nacional de los 3.000 obstáculos, después de la plata del año pasado. Sería su séptimo título, y un buen punto de apoyo para encarar después el Campeonato del Mundo, que tendrá lugar en agosto en Budapest (Hungría). Antes, en junio, debería llegar la siguiente cita internacional para la capitalina, el Campeonato de Europa por equipos, a celebrarse en Chorzow (Polonia). De manera transversal, en todas estas competiciones, está la posiblidad de conseguir la mínima para los Juegos Olímpicos de París 2024.