El Ayuntamiento de El Real de San Vicente ha difundido un comunicado de condena y «firme repulsa» del crimen del menor de 15 años en la madrileña calle de Atocha el pasado fin de semana por la vinculación de su familia con la localidad serrana. «Nuestro más sincero pésame y solidaridad con la familia en tan duros momentos», indicaba el Consistorio serrano en el mensaje difundido por los canales municipales.
El alcalde, Jorge Martín, destacaba que el abuelo de la víctima ha estado desde hace décadas vinculado de forma altruista en la vida cultural de esta localidad de 900 empadronados. «Es una persona muy querida, como toda la familia», apuntaba el regidor.
Martín acudió el martes al tanatorio madrileño en representación de El Real de San Vicente como señal de agradecimiento de los vecinos a la labor desempeñada desinteresadamente por la familia durante años. «Gente muy implicada en la vida del pueblo», resaltaba al respecto sobre la madre y los tíos del menor.
La publicación del comunicado ha desencadenado numerosas reacciones tristeza y pésame en las redes sociales del Ayuntamiento de El Real de San Vicente.
bandas latinas. La Policía Nacional ya tiene identificados y espera dar pronto con el paradero del grupo de jóvenes miembros de los Dominican Don't Play (DDP) que el sábado por la noche se enfrentaron a los Trinitarios, resultando muerto de una puñalada en el corazón el joven de 15 años, según informaron a Europa Press fuentes policiales.
Los agentes del Grupo de Homicidios y de la Brigada de Información cuentan con imágenes tanto de las personas que pasaban por la calle Atocha en el momento del crimen -a las 22 horas, una hora muy concurrida un sábado noche en la zona- como de las cámaras de seguridad de los establecimientos.
Además, ya han tomado algunos testimonios a los acompañantes del joven fallecido, que supuestamente han identificado sin ningún género de dudas a alguno de los agresores. La Policía también investiga si ambos grupos de bandas rivales quedaron para enfrentarse o si fue algo fortuito. Según algunos amigos, el fallecido no se despegó del móvil la tarde del sábado, tras jugar un partido de fútbol.