Un emotivo acto organizadopor Nuevas Generaciones recordó la memoria del edil del PP, Miguel Ángel Blanco, asesinado por la banda terrorista ETA hace 25 años. Tras la lectura del manifiesto y la suelta de globos, se guardó un minuto de silencio en el que los asistentes mostraron sus manos blancas en contra de la lacra del terrorismo emulando lo ocurrido en miles de rincones de España en 1997. Fue en ese momento cuando en un espontáneo "¡Viva España!", al que los asistentes respondieron con apremio, le siguió otro vítor al dictador, sin estar claro si fue por parte de un asistente o de un viandante que aprovechó la congregación de personas, y que fue respondido por la inercia del momento con algún "viva", ante lo que los dirigentes populares presentes miraron a su alrededor con miradas de reprobación. Un lunar que no empaña lo emotivo y simbólico de un acto que recuerda uno de los episodios más tristes de la historia de nuestro país.