La reivindicación por contar con un río Tajo vivo y vertebrador del territorio a su paso por Toledo no deja de producirse. En esta ocasión en forma de libro, por parte del arqueólogo e historiador Jesús Carrobles, quien además preside la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo.
'Cuando el Tajo importaba', se trata de un estudio histórico «con dos vertientes», tal y como explica el propio Carrobles en declaraciones a La Tribuna. Se trata de una vertiente histórica y otra actual, dirigido a hacer un homenaje al pasado a aquellos que en los siglos XVI y XVII «hicieron del Tajo una realidad impresionante como vertebrador de Toledo». Esta consideración va más allá, como el propio autor indica, ya que le dieron un enorme valor, convirtiéndolo en referencia de «lo mejor de Toledo».
El Tajo dotaba de nobleza y misticismo a Toledo, lo que hacía que fuera enormemente valorado por la ciudad, llegando incluso a servir de argumento en las demandas para la vuelta de la corte a la Ciudad Imperial. «Las bondades del padre Tajo, frente a la mezquindad del Manzanares, un aprendiz de río».
De ello se ha pasado a una realidad «completamente diferente», ya que se ha dado la espalda al río, y no existe «el menor compromiso en devolverle su esplendor».
Buena cuenta de la importancia del Tajo, queda patente en las propias ilustraciones del libro, donde El Greco lo tiene como tema central de su obra. Lejos de lo que hoy sucede donde «cuesta ver artistas que hagan referencia en pintura, literatura o música al río».
Algo que según Carrobles era «inconcebible» en la sociedad del siglo XVI, que de haber visto el estado en el que se encuentra el río «se hubiera unido en favor de su río, hoy sin embargo parece que estamos en una situación de confort donde nada nos preocupa».
El acto de presentación se desarrolló en la tarde de ayer en la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo, fue moderado por Beatriz Larraz, directora de la Cátedra del Tajo UCLM-Soliss, y contó con la intervención de María Luisa González, presidenta de la Fundación Soliss, y de Juan Ignacio de Mesa, ex-presidente de la Real Fundación de Toledo.
María Luisa González manifestó «el apoyo rotundo y decidido de la Fundación Soliss» a las iniciativas para poner en valor al río, ya que «el río es vida y prosperidad». Por su parte De Mesa, analizó y recordó los diferentes reveses que ha ido sufriendo el río, y no excusó la responsabilidad de quienes «no lo ponen realmente en valor», enfatizando la doble lectura del titular, recordando que el Tajo ha contado con importancia a lo largo de la historia, y lamentando que actualmente no sea así.