Tres ayuntamientos de la provincia han coincidido en las últimas horas en la denuncia pública de diferentes actos vandálicos que han dañado instalaciones y mobiliario públicos. El Ayuntamiento de Almorox lamentaba poco después de los hechos el lanzamiento de piedras a los cristales del pabellón polideportivo, donde se encontraban alumnos de gimnasia rítmica. El alcalde, José Martínez, indicaba a este diario que una sala cercana del campo de fútbol fue objetivo también a principios de mes de una fechoría parecida.

 «Gracias a Dios no ha habido ningún accidentado, pero dentro de las instalaciones había gente practicando deporte, que es para lo que son estas instalaciones», recalcaba el Ayuntamiento de este municipio de la comarca de Torrijos de 2.200 empadronados. Y apostillaba sobre estos hechos ocurridos el lunes:«Si algún vecino sabe o conoce quien hace estos actos le agradeceríamos que comunicara en las dependencias de policía local de Almorox».

Por su parte, el Ayuntamiento de Alameda de la Sagra publicó ayer la denuncia de la comisión de un incendio voluntario de dos contenedores municipales en la calles Orgaz. «Por si los ignorantes causantes no lo saben, les recordamos que la cuantía económica necesaria para reponer los contenedores dañados debe ser satisfecha por el Ayuntamiento; es decir, debe ser pagada por todos los vecinos de Alameda de la agra», recordaba.

El severo mensaje de este ayuntamiento de 3.800 empadronados recordaba que unos hechos parecidos había afectado recientemente a material público: «Estas conductas, más propias de energúmenos que de personas, deben dejar de producirse. El domingo 7 de noviembre, hace algo más de una semana, los bomberos tuvieron que venir en dos ocasiones, por la mañana y por la tarde, para apagar un fuego provocado, también, por la inconsciencia o por la imbecilidad en el contenedor del punto limpio», lamentaba.

Además, el Ayuntamiento de Pulgar, una localidad de los Montes de Toledo de 1.500 empadronados, denunciaba también unos hechos parecidos aunque abría también la posibilidad de que se debiera a una imprudencia. Dos contenedores de papel y vidrio ardían en la calle Fuentecilla.

«Pedimos la colaboración de todos para evitar hechos de este tipo que tanto perjuicio causan a todos los pulgareños, suponiendo un coste para las arcas municipales, y a los vecinos que tienen sus viviendas cerca, que sufren las consecuencias más inmediatas», incidía el equipo de Gobierno de losMontes de Toledo.

Asimismo, el Ayuntamiento de Pulgar agradecía la colaboración de los vecinos que ayudaron a apagar el incendio en la calle Fuentecilla con extintores.