Alejandro Davidovich, el único español superviviente en el Masters 1000 de Montecarlo, apunta a las semifinales del Country Club que tiene a un paso, a expensas de superar el viernes al estadounidense Taylor Fritz, décimo favorito, en su duelo de cuartos.

Ya sabe el malagueño de 22 años lo que es formar parte del cartel con los ocho mejores del primer Masters 1000 sobre arcilla de la temporada. En la edición del pasado curso, el que fuera campeón de Wimbledon júnior en el 2017 logró su papel más relevante en un torneo de tal dimensión. Es su techo en un Masters 1000. Hasta ahora.

Entonces dejó en el camino al australiano Alex De Miñaur, el italiano Matteo Berrettini y el francés Lucas Pouille. Se estancó ante el que fue campeón, el griego Stefanos Tsitsipas contra el que no llegó a terminar. Abandonó el partido al final del primer set.

Jugadores reputados a los que superó. Pero ninguno de la repercusión de Novak Djokovic, número uno del mundo y uno de sus ídolos de juventud. Davidovich vivió su gran día de gloria el pasado martes. Cuando arrebató el protagonismo al serbio que regresaba a la competición dos meses después. El español se llevó el triunfo.

Instalado desde hace tiempo en los cincuenta mejores del mundo, convocado para la selección española en la Copa Davis, tiene en Montecarlo su gran oportunidad de una temporada sin grandes alardes, con los cuartos de final de Doha como techo hasta el momento.

Aún sin título ni final alguna en el circuito ATP, el tenista de La Cala del Moral (Málaga) apunta lejos en el torneo monegasco.

Davidovich está citado con Taylor Fritz en el primer turno de la pista central, la Rainiero III, del Country Club. Ha emergido el estadounidense, un jugador sin grandes resultados sobre arcilla que resonó con fuerza en el pasado Masters 1000 de Indian Wells que ganó.

El hasta ahora único jugador capaz de vencer esta temporada a Rafael Nadal, en la final de aquél torneo, logró entonces su segundo trofeo. El más importante. Antes solo había levantado la copa en Eastbourne, en el 2019. Y en su historial, cinco finales, intentos fallidos. Todo y siempre en pista dura, nunca en arcilla.

Solo dos veces antes estuvo el Californiano en Montecarlo. Disfruta ahora de su mejor actuación. Un tramo superior a los octavos que obtuvo en su debut del 2019 cuando Djokovic le frenó. El pasado año no superó el primer tramo, eliminado por Roberto Bautista.

Davidovich está ante su ocasión. Más adaptado a Montecarlo y a la tierra afronta su cuarto encuentro enla competición. Venció al estadounidense Marcos Giron en primera ronda. Después ganó a Djokovic y en octavos arrolló al belga David Goffin.

Los precedentes alientan al malagueño que ha ganado a Fritz la única vez que jugaron. Fue además en tierra. En el 2019 en Estoril. El español ganó en dos sets: 7-6(3) y 6-4.