Castilla-La Mancha está participando en el proyecto piloto 'Construir para volver a ser' con el que se han desarrollado itinerarios de inclusión destinados a personas en situación de vulnerabilidad, financiado por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, con casi nueve millones de euros para este año 2022 y el próximo 2023, procedentes de los fondos europeos de recuperación, transformación y resiliencia. Un "importante proyecto" ha destacado la consejera de bienestar Social, Barbara García Torijano, que "se lleva gestando siete meses" y que está consiguiendo "generar oportunidades creando una sociedad mejor y más avanzada".
Unos mil perceptores del Ingreso Mínimo Vital (IMV) están participando en este programa que pretende favorecer la inclusión social, a través del acompañamiento, para "desempeñar un proyecto de vida" y que se haga "en un ámbito familiar y laboral normalizado" ha destacado la consejera, en un acto en el que se ha presentado este proyecto, en presencia de la secretaria general de Objetivos y Políticas de Inclusión y Previsión Social del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Milagros Paniagua quien ha resaltado que a punto de cumplirse dos años desde la aprobación del IMV "se han beneficiado 17.000 hogares de Castilla-La Mancha y 44.000 personas" llegando también el complemento de ayudas para la infancia a más de 7.000 familias y 14.000 menores de la región.
Ha explicado García Torijano que se lleva a cabo en quince zonas geográficas de la región, a través de 57 profesionales, "dando mucha importancia a la contratación de los perfiles" para que "fuera ajustado a las situaciones vulnerables" para un proyecto del que se esperan tener "resultados excepcionales" con el objetivo principal de generar una integración en el mercado laboral y poder normalizar la vida de las personas en situaciones más vulnerables.
De los mil perceptores, muchos casos corresponden a mujeres, ha detallado la consejera, destacando la intervención de la consejería de Igualdad, así como la de Empleo, para logar mayores avances a través de un "trabajo conjunto y coordinado a través de todas las áreas de gobierno" ya que son políticas "transversales".
Con este proyecto, ha dicho la consejera, se busca que "la gente no se instale en una prestación, y no la vea como un fin, sino que lo vea como un apoyo" para que, "junto al acompañamiento que se va a realizar a los participantes, puedan desempeñar su proyecto de vida como cualquier ciudadano en un ámbito familiar y laboral normalizado".