Piden un paso de cebra de acceso a la Biblioteca regional

J. Monroy
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La medida debería venir acompañada de la eliminación de la parada del autobús y el tren turístico, así como de la instalación de una valla de seguridad para evitar atropellos

El espacio donde Duarte pide el paso de cebra. - Foto: Yolanda lancha

No hay lugar más céntrico, y quizás más concurrido en Toledo que la cuesta de Carlos V; a veces tampoco lo hay más peligroso para el peatón y con más problemas de accesibilidad. José Manuel Duarte, exdirigente vecinal del Polígono e 'influencer' de las redes de la ciudad acaba de solicitar la creación de un paso de peatones para trabajadores y usuarios de la Biblioteca de Castilla-La Mancha, amén de una serie de mejoras de cara al peatón en este transitadísimo entorno. La petición, apunta Duarte, llega en vista de la experiencia propia, pero también movida por trabajadores y usuarios de la dotación.

La propuesta pasa en primer lugar por eliminar la parada de autobuses y tren turísticos de ese espacio «y sean llevados al lugar que tienen reservado para ello, ya que están ocasionando varios problemas graves, la invasión de la acera de la fachada de sindicatos, donde se han producido varios accidentes por el estrechamiento de esta, y porque al quedarse la calle más estrecha, obliga a los autobuses urbanos  pegarse mucho a la acera de la Biblioteca, llegando incluso a invadir la acera y poniendo en peligro la integridad física de los trabajadores y usuarios tanto de la Biblioteca, sindicatos, y peatones».

Cuando así haya sido, el Ayuntamiento podrá colocar una barandilla artística a la salida de la Biblioteca por la Cuesta de Carlos V, «para que los usuarios por un despiste no puedan invadir la calzada y se expongan a ser atropellados».

La tercera actuación ya podría ser el paso de peatones debidamente señalizado, frente a la esquina de Sindicatos, que une la cuesta de Carlos V con la calle Horno de los Bizcochos.

Mas reivindicaciones. De paso, Duarte aprovecha para hacer dos reivindicaciones más. Pide que a las trabajadoras expendedoras de tickets para el trenecito o para el autobús turístico «se les proporcione un puesto de trabajo digno», para que dejen de estar expuestas a las inclemencias del tiempo y a accidentes por atropello.

Además, pide que el Ayuntamiento inste «a quien corresponda» a limpiar una puerta en la zona sucia, llena de grafitis y de meadas humanas, así como los vierteaguas de las ventanas y sus entornos.

Duarte concluye recordando que «esto es zona turística, y que para que los trabajadores y usuarios de los servicios de la zona puedan cruzar legalmente y sin peligro, el paso de peatones más cercano está junto al Arco de la Sangre». «Creemos que el problema está bien definido, pero si hay alguna duda o error, estamos dispuestos a colaborar en subsanarlo», concluye el vecino.

En las mismas redes, la propuesta está obteniendo apoyos, entre otros, del portavoz del Grupo Municipal de IU-Podemos, Txema Fernández, quien explica que «esta demanda ya está en el Ayuntamiento». Hace dos semanas su grupo registró un escrito pidiendo el paso de peatones y que se trasladen el autobús y tren turístico a los lugares que tienen reservados, calle Unión y cuesta de los Capuchinos respectivamente. «Mantenerlos donde están sin motivo, el contrato permite ponerlos en ese otro lugar y por eso hay señales, es dar prioridad a la actividad turística privada, frente a la convivencia vecinal», valora.

A su juicio, el paso de peatones daría tranquilidad a vecinos, personal y usuarios de la Biblioteca Regional que hoy se encuentran cruzando sin seguridad