Los españoles mayores de 16 años podrán conducir un vehículo eléctrico con una velocidad máxima de 90 kilómetros por hora y 400 kilos de peso. Así lo regulará la Dirección General de Tráfico (DGT) en un nuevo permiso de conducir B1 específico que anunció el pasado mes de junio el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, junto con el director de la DGT, Pere Navarro. Según los datos del INE, la creación de este nuevo documento daría acceso a más de un millón de nuevos conductores.

La filosofía de esta medida, ya implantada en Francia, es que el público más joven comience a familiarizarse  con un vehículo aprendiendo de la movilidad eléctrica para llegar a la edad adulta con una completa sensibilización hacia este tipo de vehículos.

Este anuncio se enmarcó dentro de la presentación de la Estrategia de Seguridad Vial 2030, cuyo gran objetivo es el de reducir a la mitad los muertos en carretera al finalizarla década: de 1.755 de 2019 a nomás de 877 víctimas. Con este fin, el nuevo plan contempla, además de impulsar este nuevo carné para los menores, promover los exámenes de conducir con coches con cambio automático, exigir el seguro ro obligatorio de responsabilidad civil entre los dueños de patinetes y acortar los plazos de renovación del carné entre los conductores más mayores.

Una estrategia que despliega 62 líneas de actuación en planes bienales que servirá para «para salvar vidas», subrayó el ministro.

Concretamente, el periodo 2022-23 apuesta, sobre todo, por la educación y la formación, pero también contempla nuevas normas para los vehículos de movilidad personal, la actualización de los permisos de conducción, la potenciación del vehículo conectado o la aprobación de un nuevo catálogo de señales.

Por ejemplo, Marlaska apuntó que el 98% de los exámenes de conducir se realizan en vehículos con cambio manual, en tanto que la mayoría de coches eléctricos cuya compra se quiere potenciar son automáticos, por lo que se modificará el Reglamento de Conductores para facilitar el uso de estos coches.

En esta misma línea se manifiestan desde la Asociación Provincial de Autoescuelas de Toledo. Para su presidente, Antonio Gutiérrez, es un avance que «está contemplado dentro del planteamiento del carné de conducir europeo», pero  recuerda que «el éxito o no de la medida, residirá no en la edad de los conductores, sino en la forma de impartir los contenidos así como la asimilación por parte de los conductores».

Además Gutiérrez recuerda que «con 16 años un conductor puede manejar una motocicleta que tiene menos estabilidad que un cuatriciclo, por lo que ponerles al volante de un vehículo no tiene por qué suponer un riesgo añadido sino una opción de mayor seguridad», explica el presidente de la patronal provincial de las autoescuelas.

Respecto a los vehículos para realizar dichos exámenes, no encuentra problemática a la propulsión eléctrica o el cambio automático ya que «muchas autoescuelas ya cuentan con coches así», lo único que no se atreve a pronunciarse es si habría que implementar alguna limitación a los vehículos actuales para adecuarlos a la nueva normativa, algo que según afirmó, «tiene que perfilarse todavía», al igual que la fecha de entrada en vigor del nuevo permiso, aunque según creen desde la asociación «será antes de final de año».

Del mismo modo, Gutiérrez, asemeja el nuevo permiso de conducir al ya existente A1 en el caso de los ciclomotores, que ya conlleva unos conocimientos teóricos tales que al obtener el permiso A, solamente habría que refrescar y actualizar los referentes a la conducción del vehículo, que en el caso de las motocicletas implica de hasta 125 cm3, y una potencia máxima de 11 kW en el primero, frente a cualquier tipo de cilindrada; siendo los conocimientos teóricos los mismos, por lo que con las licencias B1 y B, la «tesitura habría de ser la misma».

De esta forma el colectivo se muestra partidario de añadir esta nueva categoría, que permitirá circular por cualquier vía a los conductores, siempre y cuando no rebasen los 90 km/h.

RENOVACIÓN DEL PERMISO. En este primer plan bienal de la estrategia también se actualizarán las pruebas de aptitud psicofísicas de los Centros de Reconocimiento Médico de Conductores, una norma que no se ha modificado en los últimos 15 años.

Junto con esta medida, Interior quiere revisar los plazos de renovación de los permisos de conducir en consonancia con la directiva Europa, de forma que se reduzcan en el caso de los conductores mayores y se amplíen entre los jóvenes.

Precisamente a este colectivo de usuarios más jóvenes van dirigidas buena parte de estas primeras acciones, pues la Educación en Movilidad Segura y Sostenible llegará a las aulas a partir del próximo curso, además de la puesta en marcha el próximo otoño de los primeros cursos del título de Técnico Superior en Movilidad Segura y Sostenible en la Formación Profesional.

Otra medida importante es el uso obligatorio del airbag para las pruebas de circulación en moto en los exámenes de conducir. Sobre este asunto, el ministro indicó que en breve los agentes de la Guardia Civil de Tráfico contarán con este elemento de protección.