Van ya varios partidos con marcadores ajustados que se han acabado esfumando para el BM Ciudad Imperial femenino. Para su técnico, es imposible acabar ganando «si dejas a los rivales que se vayan de ocho o más goles», aunque es verdad que le consuela que cada vez están más cerca de sacar adelante triunfos.
Para el preparador, la dinámica «es positiva», con cada vez «menos errores y un mayor porcentaje de acierto en la portería contraria». El objetivo, por tanto, es evitar esos «diez minutos de pájara» que las jugadoras tienen en los inicios de los encuentros, o también en los arranques de las segundas partes, y que al final les obligan «a ir siempre a remolque». Diego García insiste en que «en el momento en que no dejemos a las contrarias que se desmarquen en el electrónico, ganaremos partidos».
Para él, el momento idóneo empieza el próximo sábado, en el encuentro que medirá a las toledanas con el Adesal Córdoba en el pabellón de Santa Bárbara. Se trata de un rival que viene de arriba, y que esta temporada partía entre los favoritos, aunque los resultados le han dado la espalda, de momento. «Solo tienen una victoria, y no están jugando bien, así que creo que es un encuentro que en casa tenemos que pelearlo», reconoce el entrenador.
Por lo demás, luego tendrán que enfrentarse a otros rivales de 'su liga', como el BM Parla, el BM Leganés y el Costa de Almería, más contrincantes que, en teoría, van a pelear por los mismos objetivos que el Imperial.