El Colegio de Enfermería de Toledo ha celebrado su tradicional cena del Patrón, San Juan de Dios, en la que se congregaron unos 300 enfermeros de la provincia de Toledo, en una cita que ya es un referente anual por compartir y vivir momentos de hermandad entre estos profesionales y que no se había celebrado los últimos dos años debido a la pandemia.

En representación de los enfermeros toledanos presidió el acto el presidente del Colegio, Roberto Martín, al que acompañaron representantes del resto de Colegios profesionales sanitarios, médicos, farmacéuticos y veterinarios.

Roberto Martín agradeció la presencia a todos los asistentes y subrayó «estar muy orgulloso de las enfermeras y enfermeros toledanos, que han sido capaz con su competencia, coraje y esfuerzo personal, poniendo incluso su salud en riesgo, de sacar adelante en términos de salud a nuestro país junto al resto de profesionales sanitarios de una crisis jamás vista. Un papel que no ha terminado ahí, sino que ha continuado a través en la gestión de la campaña de vacunación Covid y de la gripe, así como en la vigilancia epidemiológica rastreando contactos».

Un día de hermandad, que pone el broche de oro al recién celebrado Día Internacional de la Enfermera el pasado 12 de mayo, en el que el Colegio toledano llevaba a cabo el Reconocimiento Enfermero 2022 a todas las enfermeras de la provincia de Toledo por su actuación frente a la pandemia.

La cena ha sido también lugar de reivindicaciones y de demandas a las administraciones públicas en las que la Institución Colegial continúa trabajando, contra la precariedad laboral y la escasez de enfermeras muy por debajo de la media europea, lo que lleva a una sobrecarga asistencial difícilmente soportable, por la implementación de puestos de trabajos de todas las especialidades enfermeras en el servicio de salud, o por la homologación laboral de las enfermeras al grupo A1.