El nuevo Centro de Transfusión abrirá el mes que viene

Mario Gómez
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Además de la inminente mudanza, la Hermandad de Donantes de Sangre hace un llamamiento a las donaciones del grupo 0+, y a la búsqueda de un patrocinio que les permita adquirir un autobús de donación para el Centro de Transfusiones

La inauguración de la nueva ubicación del CDT será el próximo mes. - Foto: Yolanda Lancha

«La provincia de Toledo puede estar satisfecha, lejos de los números la mejor noticia es que todas las necesidades de sangre durante 2022 han estado cubiertas». Así de rotunda se mostraba Begoña García, presidenta de la Hermandad de Donantes de Sangre, durante un almuerzo con los medios.

Sin duda, el hecho de que la asociación haya visto cubiertas sus demandas durante el pasado año, es el mejor termómetro de «la solidaridad de los donantes».

Sin embargo, desde la entidad no dejan de fijarse ambiciosos horizontes, pues de momento andan «buscando patrocinadores» que les permita adquirir un autobús de donación para el Centro de Transfusiones, algo que les permitiría «llegar a multitud de lugares que no cuentan con espacio para realizar una colecta», explicó la coordinadora de la Red de Hemodonación, Hemovigilancia y Hemoterapia de Castilla-La Mancha, la doctora Elena Madrigal.

Más allá de esta búsqueda de fondos para ampliar las posibilidades de las colectas, y la inauguración de las nuevas instalaciones del Centro de Transfusión que se ubicará en el Centro de Especialidades, Diagnóstico y Tratamiento, que se producirá el próximo mes, permitirá 10 puestos de donación y «el inicio de la donación de tejidos», el llamamiento que a día de hoy hace la entidad es «a la donación en el grupo 0+». Según deslizan, el hecho de que se trate de un grupo considerado como «donante universal», hace que su necesidad «siempre sea alta».

Más allá de ello, y con el horizonte del 28 marzo donde volverá a celebrarse la tradicional maratón de donaciones de Eurocaja Rural, previa a Semana Santa, las responsables de la Hermandad y del Centro de Transfusión, mostraron su satisfacción con la respuesta de los donantes que en 2022 registraron un total de 1.678 altas nuevas; lo que lleva a las donaciones totales a 19.876, un 2,33% más que en 2021, y a pesar de que 2.136 personas fueron rechazados por diversos motivos.

Desde la Hermandad recuerdan que en el caso de la donación de sangre, las bolsas tienen «una vida útil» de 42 días, algo que «nunca se cumple, puesto que no tardan más de 20 en salir del Centro». Por el contrario, la donación de plasma permite una conservación de hasta tres años, mientras que las plaquetas no tendrían un uso más allá de los siete días, por lo que se antoja fundamental «contar con un servicio de transporte urgente», como el que existe, con el que se distribuye según las necesidades; incluso entre los otros dos centros de transfusión de la región.