En 24 horas se cumple el plazo. El Consejo de Ministros tiene que decidir hoy si valida el decreto que amplíe el actual paraguas de protección de los ERTE por causa de fuerza mayor para que las empresas en dificultades puedan incluir a sus trabajadores en el cobro de la prestación por desempleo. La hostelería es uno de los sectores más castigados y desde hace días llevan movilizándose para exigir al Gobierno central que reconsidere sus medidas. Ayer, en la plaza de Zocodover, lograron reunir al mayor número de personas en una concentración en la ciudad desde el comienzo de la pandemia. Unas 500 personas acudieron a la llamada de la Asociación de Hostelería de Toledo (AHT) para exigir una serie de medidas específicas que les ayude a salir de la crisis del coronavirus, clamando que ellos no son el virus.

Superando todo tipo de problemas con los altavoces, con deficiente audio que por momentos desconectaba a los asistentes del acto, representantes de la hostelería de la provincia fueron exponiendo sus reclamaciones hasta la lectura de un manifiesto con una serie de medidas directas para ayudar al sector que, tras la concentración, fue entregado en la Delegación del Gobierno.

El lema de la concentración dejaba muy claro el dramatismo del momento por el que atraviesan muchos negocios de la capital. «La hostelería se hunde, salvemos la hostelería» rezaban los carteles repartidos entre los asistentes, así como unas mascarillas creadas para la ocasión con el objetivo de recaudar fondos para un sector que en la ciudad de Toledo, eminentemente turística y de ocio, representa nada más y nada menos que el 24% de su PIB y que da trabajo directo a 14.688 personas.

Los hosteleros claman por la prórroga de los ERTE y ayudas - Foto: Yolanda Lancha

Valentín Moreno, representante de la hostelería de Talavera y su comarca, o Carlos Torres, de la zona de Villacañas, fueron los primeros en tomar la palabra en un acto que contó con muchas participaciones, pero que todas se resumían en la acuciante necesidad de un sector que clama por mantener los ERTE y recibir ayudas directas.

«Cumplimos todas las medidas que nos han impuesto y no somos los culpables de lo que está pasando», afirmó emocionado Carlos Torres, un sentir que también fue compartido por Eusebio Barrasa, que acudió a la concentración como representante de los distribuidores, otro sector indirectamente afectado, y que pidió a los hosteleros unidad «para tener más fuerza».

Víctor Carrillo, representante de los locales de ocio nocturno, fue otro de los que ayer tomó la palabra en Zicodover para denunciar la terrible situación de su sector. «Si la hostelería está en una situación alarmante, el ocio nocturno está al borde de la desaparición», afirmó para incidir en una cuestión en la que todos están de acuerdo: «Si no podemos abrir por lo menos que se establezcan ayudas», señaló mientras aseguraba que el ocio nocturno no es parte del problema y sí que puede serlo de la solución, porque con su apertura bajo medidas de seguridad e higiene se puede poner fin a muchos botellones que han prosperado desde el cierre y que se convierten en claros focos de contagios.

El presidente de los hosteleros toledanos, Tomás Palencia, fue en la misma línea que el resto de sus compañeros, pero tuvo un mensaje para Moncloa. «Al Gobierno le pedimos lo que prometió, que ninguna empresa se quede atrás, y que todos salgamos de esta crisis. Necesitamos urgentemente la prórroga de los ERTE, sino estamos muertos, y a nuestros trabajadores los arrastraremos con nosotros. Estamos agotados, basta ya de tenernos en este punto de mira. Nosotros no somos los culpables, no somos el virus», afirmó el presidente de la AHT.

Finalmente, la concentración se cerró con la lectura del manifiesto que de forma conjunta se presentó ayer en las cinco provincias de Castilla-La Mancha. En sus renglones, las mismas reivindicaciones ya conocidas del sector y la necesidad de que el Gobierno las tenga en cuenta por el bien de muchas familias.

Un plan de rescate que incluya ayudas a fondo perdido para las empresas que presenten pérdidas, la prórroga de los ERTE con un cambio en el sistema de bonificaciones a la Seguridad Social y exoneración total del pago de cuotas a aquellas empresas que no puedan abrir por falta de actividad o por disposición legal (ocio nocturno), la ampliación de 2 años en los periodos de carencia de la financiación ICO recibida por motivo del Covid-19, ayudas al alquiler y bonificación fiscal en costes de arrendamientos y suministros, bonificación fiscal en Impuestos Especiales y Tasas Municipales (en Toledo han pagado ya la tasa de basura, la de terrazas y la primera mensualidad del IBI), la aplicación de bonos de activación de la demanda a familias y empresas, la reducción temporal del IVA en Hostelería al 4% y la elaboración de un Plan Estratégico para la Gastronomía.

Una completa batería de medidas con las que los hosteleros piensan que podrían campear la crisis y cuya aceptación o no, parcial o total, comenzará verse en la misma jornada de hoy con la ansiada prórroga de los ERTE.