La hostelería sufre el repunte de contagios con anulaciones

Lola Morán Fdez.
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La Asociación de Hosteleros de Talavera confirmó que se prevé una Nochevieja «floja», incluso más que esta Nochebuena, donde ya cayó la afluencia de público

Imagen de archivo de las cañas de Navidad del año 2019 en la zona del Casco Antiguo. - Foto: L.G.C.

La hostelería está sufriendo las consecuencias del repunte de contagios de coronavirus con cancelaciones de la gran mayoría de cenas reservadas para estas fiestas. Un varapalo que llega ligado de manera directa a ese aumento de los contagios, pese a que a principios de este mes de diciembre las previsiones eran buenas para el sector en  Talavera, que ha visto cómo desde mediados de mes las reservas han comenzado a caerse hasta quedar tan solo en sus agendas «algunas cenas sueltas» con un número reducido de comensales. Así lo confirmó ayer a La Tribuna Ángel Heras, presidente de la Asociación de Hosteleros de Talavera y Comarca, quien confirmó que, conforme han ido pasando los días, «la cosa ha ido bajando».

El fin de semana del 18 de diciembre es cuando comenzó el declive, «se empezaron a anular cenas y comidas de grupos grandes» hasta quedarse casi todo «anulado». De tener la agenda prácticamente llena se ha pasado a tener apenas demanda, hasta el punto de que se prevé cerrar el mes con cifras más bajas que las cosechadas en diciembre de 2020. Un año en el que, como recordó Heras, la hostelería contaba con restricciones de aforo y de horario, algo que ahora no existe. Entonces, dijo, era preciso que todos los clientes fueran servidos en mesa, algo que no impidió que hubiera actividad e incluso más que en este momento.

El miedo a un posible contagio ante el incremento de casos Covid-19 e incluso algún positivo son los motivos que están provocando esta dinámica de cancelaciones así como demandar mesa en terraza en el caso de que deciden continuar con su reserva.

«No recuerdo unas cañas de Nochebuena tan flojas, y eso que el año pasado tenía que estar todo el mundo sentado, pero la gente tenía ganas y se trabajó bien pero este año hay mucho miedo», expuso Heras. Pese a ello, la previsión es que la Nochevieja sea «más floja» aún que el pasado 24 de diciembre porque sigue creciendo el número de casos en la ciudad, al igual que en el resto del país.

Con todo, el año se cerrará con unos ingresos mucho más bajos que los que suelen registrarse en estas fechas, que son las que generan una mayor actividad económica en la hostelería. Sobre esta cuestión, Heras indicó que la caja que se hace en el mes de diciembre suele servir para compensar la escasa actividad que se genera en los meses de enero y febrero, y este año no será así.

Toda esta situación se ha traducido además en que las contrataciones que tenía previsto hacerse en los establecimientos hosteleros al final no se han materializado puesto que no hay la actividad esperada para estas fechas.

Por otra parte, desde la asociación talaverana no descartan que se imponga en próximas fechas alguna restricción al sector, dado el avance de la pandemia, bien de aforo o de horarios, lo que podría dificultar aún más recuperar parte de la actividad.