La Asociación Provincial de Hostelería de Toledo espera poder seguir trabajando con una temperatura máxima este verano de 25 grados de ambiente en sus locales. Así lo ha expresado el secretario de la Asociación, Valentín Salamanca, después de que sus técnicos hayan estudiado el Plan de Ahorro Energético del Gobierno y de las últimas palabras de la ministra Teresa Ribera.

Salamanca apunta que la propia norma recoge que en los trabajos que no son ligeros, como los de la Hostelería, no se tendrán que aplicar los 27 grados de máxima, sino los 25 de la normativa de Salud Laboral. A ello, además, está apelando el sector en sus propuestas.

Hay que recordar que la normativa de Salud Laboral establece que los trabajos que no son ligeros se tendrán que desarrollar entre 14 y 25 grados. Los 27, por lo tanto, quedan para trabajos sedentarios.

Ahora la Asociación tendrá que ver en qué medida afecta subir los termostatos a 25. Salamanca apunta que probablemente dependa del tipo de local, porque no es lo mismo un comercio, que en un establecimiento con maquinaria, cámaras, cafetera y plancha. A su juicio, habrá que tener en cuenta el tipo de local y el aislamiento, "y al final no se tratará de poner 27 o 25 grados, sino que la temperatura del ambiente esté en 25 con la correspondiente humedad.

Quedan otras dudas a la Asociación, como la instalación de mecanismos en las puertas o cómo se combina el ahorro energético con la necesidad de ventilar.