Para Esteban Becker, el empate en el derbi ante el CD Toledo también fue «justo». Eso sí, añadió la coletilla de que, si fuera un combate a los puntos, el triunfo se lo habrían llevado ellos porque tuvieron «más aproximaciones, sobre todo en la segunda parte».

El técnico argentino confesó que le sorprendió la defensa de cinco de los verdes, un sistema que le permitió cierta comodidad durante el primer periodo. Además, consideró que el tanto de Angelito fue «un mazazo», pero, a la vez, «un cachetazo para despertar e irnos a por algo».

Los ajustes en el descanso cambiaron todavía más la cara del equipo rojiblanco, que, según su técnico, logró el empate «por acoso y derribo». En cualquier caso, reconoció que sus jugadores «acusaron el ambiente», pues no practicaron el juego habitual: «Somos más de bajar el balón al piso y jugar».

Por lo demás, aseguró que tuvieron cierta precipitación, quizás porque el CD Toledo no les permitió «estar cómodos». En cualquier caso, como añadió, «el portero les salvó de haber perdido». Becker valora que el CD Toledo se muestre como un conjunto «serio y sólido, al que cuesta hacerle gol». Por eso ve virtud en haber sumado tres victorias y seis empates en las nueve jornadas disputadas: «Ya dije que iba a ser la Liga de los empates, y me parece que nuestros números son buenos».