Fueron casi ocho siglos en los que los cristianos pretendieron reestablecer el control sobre las fronteras españolas, perdidos allá por el 711 cuando se produjo la conquista del reino visigodo por dirigentes musulmanes del Califato omeya.

Empieza una larga etapa que sirve para ambientar la última novela de Isabel San Sebastián Cabasés (Chile, 1959). 'La dueña' se ambienta entorno al año 1069, cuando cristianos y musulmanes libran una lucha sin cuartel en Hispania, divididos a su vez en reinos y taifas arrasados por disputas intestinas. En ese mundo despiadado, Auriola relata a su nieto Diego la gesta de su abuelo Ramiro, caballero de frontera caído en combate al servicio de su rey, mientras defiende sola la tierra que su esposo ganó con la espada. Abuela y nieto deberán sobrevivir a las guerras fratricidas entre Navarra, León y Castilla, salvar el legado familiar y plantar cara a la brutal acometida de los almorávides. 

Además de una obra que refleja en toda su crudeza y fascinación una época determinante de España, La Dueña es un emotivo relato que llega al corazón y que nos muestra cómo los grandes conflictos de la Historia afectan a miles de historias anónimas escritas con sangre y sudor.

Una obra con la que pretende hablar desde la «abuelez», algo que reconoce que «le ha dado muy fuerte», viéndose reflejada en el personaje protagonista, por ella misma haber contado a sus hijos «quién han sido sus abuelos». 

Un acto en la Real Fundación de Toledo en el que comenzó la periodista Esther Esteban,guiando el acto de forma muy amena y cargado de anécdotas, como el origen de los edredones de plumas, de los que hay constancia en la Edad Media, reconociendo que se trata de un «rito» en el que los componentes habituales son el propio presidente regional, la autora, y desde hace algunas ediciones el propio vicepresidente de la Real Fundación, puesto que son los habituales en las presentaciones de San Sebastián.

La autora quiso agradecer el éxito de sus novelas, en las que pretende reconocer «el día a día de la clase media», dotando de protagonismo a las mujeres. Un agradecimiento que hizo extensivo a García-Page, porque a pesar de ella «no haber sido nunca socialista, Emiliano nunca ha sido sectario», y presume de poseer una «relación cordial entre un periodista y un político», más si «están en dos hornacinas políticas tan distintas», antes de leer un fragmento de la obra, y sentenciar que «Toledo es muy España».

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, puso en valor el talante trabajador de la autora, y la inteligencia de San Sebastián, que provoca que «merezca la pena escuchar». García-Page destacó la reivindicación que hace San Sebastián de la figura de la mujer, «algo que no ha ocurrido durante mucho tiempo». Tono muy distendido el del presidente regional, que incluso hizo alusión al turismo, gobiernos, y las bondades de España, y la efeméride de la institución de los colores rojo  y gualda de la bandera española, y la necesidad de tener claro que «la unidad te hace fuerte y la fragmentación te debilita».

Por su parte, durante su intervención Carrobles destacó el resumen que supone esta obra para conocer la evolución histórica de España.

San Sebastián es autora de numerosos ensayos que gozan de gran predicamento entre sus lectores, y con los que ha logrado vender más de medio millón de ejemplares.