El diseño para la implantación de una zona de bajas emisiones en Talavera concluirá este mes de abril y estará en funcionamiento antes de finalizar el año en una primera fase. Así lo confirmó a La Tribuna el concejal de Hacienda y Contrataciones y Seguimiento de las Concesiones, Luis Enrique Hidalgo, quien indicó que la empresa consultora externa a la que se ha adjudicado este contrato está ultimando este estudio, que recogerá las singularidades de esta zona y que estará listo a finales de este mes.

Para llevar a cabo este proyecto, el Ayuntamiento talaverano concurrió a una convocatoria de ayudas de la Dirección General de Economía Circular y los planes de impulso al Medioambiente y cambio climático por la que se le ha concedido una subvención cercana a 90.000 euros destinadas al diseño e implantación de esta zona de bajas emisiones.

Antes del próximo 31 de diciembre deberán haberse dado los primeros pasos de esta zona de bajas emisiones, que, como ya avanzó el edil, se iniciará por la calle Trinidad.

Este primer proyecto piloto en la calle Trinidad, que cuenta ya con un sistema de pilonas retráctiles donde los vecinos y comerciantes de esta vía disponen de unas tarjetas para poder acceder a este espacio. Este sistema, como explicó en su momento el concejal de Hacienda, se cambiará por otro de cámaras de detección de matrículas, lo que permitirá elaborar «listas blancas» para que todos aquellos vecinos que tengan garajes en el entorno puedan acceder, así como para facilitar a los comercios las zonas de carga y descarga y el acceso a sus negocios. Asimismo, se establecerán horarios en los que los coches puedan circular por esta calle y compaginarlo con el tránsito peatonal y la dinamización de los comercios y resto de negocios que hay.

Para la puesta en marcha de este nuevo sistema se contará con una nueva ordenanza.

Esta primera fase será el punto de partida para el diseño integral de esta zona de bajas emisiones en el entorno urbano Talavera. Este diseño global es el que se está terminando de elaborar con cargo a la subvención de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, igual que su implementación en la calle Trinidad, pero el resto de zona de bajas emisiones se ejecutará con cargo a otra subvención de los Fondos Next Generation.

Todo ello, como recalcó Hidalgo, se hará «para dar cumplimiento a la Ley contra el cambio climático y transición energética, que establece que los municipios de más de 50.000 habitantes han de contar con una zona de bajas emisiones implantada antes del 1 de enero de 2023.