Si en España la inflación está por las nubes, en Castilla-La Mancha un poco más. Con dato de febrero, en el país había crecido un 7,6 por ciento en un año, pero es que en la región llega al 9 por ciento. El consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha apuntado hoy que tiene su teoría de por qué es así y la expuso en el debate parlamentario, aunque precisó que era su «humilde opinión». 

Ruiz Molina explicó que en términos generales la inflación se está produciendo por el incremento de la energía y porque durante la pandemia se generó un ahorro, que luego ha provocado una demanda embalsada que está haciendo presionar a la oferta que no pude responder a dicha demanda. La guerra de Ucrania ha acentuado esta situación. En el caso de Castilla-La Mancha Ruiz Molina sugirió que «como consecuencia de que la reducción del PIB fue menor en la pandemia, fuimos capaces de generar más ahorro, lo que hizo fue generar mayor demanda, una demanda embalsada, que es la que está generando estos precios». 

Como la oposición le pide que baje los impuestos, Ruiz Molina les rebatió que la inflación se combaten o con políticas de rentas entre empresarios y sindicato o con políticas monetarias, que dependen del Banco Europeo. «En la vida he escuchado ni he leído que ante una situación de inflación haya que bajar los impuestos», recalcó. 

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